Capítulo 49

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Observé la habitación completamente vacía. Sonriendo de una forma amplia.

— ¿Nunca habías usado esta habitación para algún otro uso? 

Había preguntado curiosamente mientras el negaba levemente con la cabeza.

— No realmente. Desde que llegué a esta casa eh vivido solo — hizo una pequeña pausa — Pero tenía planeado hacerlo una habitación de musica

Acercó su cuerpo a las ventanas para abrir de esta misma permitiendo que la luz del sol entrara y iluminara la habitación

— Además de que nacieron planes muchos mejores teniéndote a mi lado — terminó en un tono suave.

Sonreí leve y algo sonrojada. Mi mano tocó mi vientre con cuidado mientras seguía con la amplia y radiante sonrisa.

Alcé mí vista observando a Leonardo.

— ¿Comenzamos?

Asentí.

— Si.

Tomé la aspiradora eléctrica para enchufarla a la pared. Estaba muy cómoda, me había levantado y Leonardo se había encargado de limpiar la casa.

Ya todo estaba limpio e impecable. Me sorprendía mucho que en tan poco tiempo había hecho grandes cosas ayudándome un poco. Aunque siempre el era así.

Pero al igual... el era muy rápido en muchas... "Cosas"

Solté una leve risa sin querer sintiendo su mirada sobre mi.

— ¿De qué ríes? — preguntó curiosamente.

Parpadee un par de veces mientras lo observaba algo sonrojada. Sabía que lo estaba por él hecho de que sentía mis mejillas un poco calientes.

— Mmmm... nada — me limité a decir sonriendo.

Él asintió mientras tomaba un roseador para vidrios junto una franela comenzando a limpiar las ventanas, las cuales, estaban algo opacas por la suciedad y el polvo.

Mis ojos estaban sobre él, podía distinguir como sus músculos se marcaban con cada movimiento que hacía. Relami mis labios mientras lo inspeccionaba desde abajo hacía arriba observando con detenimiento lo atractivo de Leonardo.

Me sentía afortunada.

Era afortunada.

Soy afortunada.

Él simplemente encajaba conmigo a la perfección yendo más allá de lo "físico" también "sentimental" y "personalmente ".

Sonaba egoísta pero yo lo veía desde esa perspectiva. Tal vez... Él podría ser esa "otra mitad". Mi complemento.

Suspire mientras sonreía.

Encendí la aspiradora comenzando a pasarla con cuidado por toda la habitación para así poder quitar toda huella y rastro de polvo que había en esta misma.

Teníamos que adaptar esta habitación para nuestro nuevo integrante. Estaba bastante sucio pero al igual por ello ambos estábamos cooperando para hacerlo "Su nuevo hogar"

Al terminar de aspirar cada rincón de la habitación lo observé. Se veía impecable, pero le faltaba algo de color y los muebles, obviamente. La habitación estaba vacía.

Supuestamente los muebles llegaban en un par de horas o minutos más, así que tendríamos que pintar la habitación.

Leonardo había terminando de limpiar las ventanas, las puertas y los puertos de electricidad, tanto como la luz de la habitación.

BLACK  // Completa ||EN EDICIÓNDonde viven las historias. Descúbrelo ahora