Quiero un beso bajo la lluvia

Capitulo 59

-.. I can't go back again...-cantaba mientras Dead memories de Slipknot invadía mi piso y yo sujetaba un tenedor con la mano.-.. Dead memories in my heart...

Aquel grupo me encantaba. Eran realmente impresionantes. Sus componentes habian sufrido todo tipo de problemas pero aun asi seguian adelante. Era como un incentivo para mi. Cualquier persona en mi situación lloraria, gritaria y se desesperaria. Yo... en cambio, se que nada me espera fuera. Solo tengo que desear mis 18 para huir de esta cosa a la que parecen designar "lugar de recuperación".

Sonaron unas llaves seguidas de que la puerta se abrió y no tardé en ver al sujeto de antes pero esta vez con el rostro contraído.

-Si te doy asco ya puedes largarte que el sentimiento es mutuo.- Comenté dandome la vuelta para regresar a la cocina.

Estaba sonando Snuff tambien de Slipknot y dudaba mucho que me oyese porque el sujeto en cuestión, no se habia movido del sitio. Tampoco me importaba mucho su presencia, ya habia acabado mi concierto.

-¿Eres el enfermero?- pregunté asomando la cabeza por el pasillo.- Dereck dijo que vendrías.

-Dereck dice muchas cosas...-murmuró, sin mirarme.- Si soy ese mismo. Encantado soy... Aaron.

-Alexandra Grahams.-Saludé regresando a la cocina.- Si te molesta la música te jodes. Y cierra la puerta antes de que a Dereck le dé un ataque.

Aaron apareció por la cocina no mucho mas tarde y yo saqué del microondas la pasta sosa que mi secuestrador... digo Dereck habia cocinado especialmente para mi y mi delicado paladar. Nòtese el sarcasmo y asco que le tengo a ese hombre.

-Y cuentame, ¿que tal va tu recuperación?- dijo aquel chico, sentandose en un taburete junto a la mesa.

-¿Eso no deberias decirmelo tú?

-Es verdad. Pero.. yo solo estoy aqui para..

-Comprobar que mi entorno es tranquilo y apacible.- Le interrumpí.

-¿Puedes bajar la música?

-¿Puedes alzar la voz?- le imité poniendo una mueca.- Estoy enferma y debes complacerme- añadí llendo al reproductor de la sala para bajar  volumen.- ¿Contento Su Majestad?

-Ahora si.-Respondió con una sonrisa.- Bueno, Alexandra. Cuentame. ¿Que haces todos los dias aqui?

-Dormir. Tomar pastillas. Dormir. Comer. Cagar. ¿Yo tambien cago sabes?- aquel tipo no sabria explicar porqué pero me molestaba a la vista pero no tanto como Dereck.- Tomo eso- señalé la pastilla que habia junto al vaso.- Son somníferos.

-¿Qué?

-Mientras mas duerma mas rápido pasa el tiempo. Y eso es lo que quiero. Irme de aqui apenas pueda. Odio este sitio. Me siento en una cárcel. Dereck me da miedo. No tengo donde huir.. Hana no aparece por ningún sitio. Ni ha llamado.

Aron esbozó una sonrisa pero a la vez se echó a llorar. No supe explicar mis motivos pero fui y le abrazé, dejando que sollozara en mi hombro. Aquel tipo era muy raro.

El gusto de Emilio era cada vez peor a la hora de elegir a sus ayudantes los cómplices de secuestro.

-Alexandra...-susurró, apartándome un poco.

Nos estabamos mirando a los ojos y él comenzó a acercarse... para acabar besandome. A lo que respondí con apartarle y darle una bofetada.

-¿De que vas?- pregunté tras apartarme.- Vete. ¡Ya!

-Alex... yo..

-Alexandra- le interrumpí, señalándole la salida.

Despues de oir la puerta cerrarse apagué la musica y tiré la pastilla por el retrete. Estaba algo cansada de solo dormir, por mucho que el tiempo pasase más rápido.