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Abrió los ojos y una abrumadora luz blanca le invadió su vista. Miró a su alrededor, viendo máquinas que le rodeaban, cables conectados en su cuerpo, su torso vestido con una tela celeste y una sábana blanca que lo tapaba. Vio a una mujer sentada en una silla a su lado, y era su madre.

-¿Mamá...?- dijo sin fuerzas. Le pesaba todo. Estaba muy cansado.

-¡Lancey! Mi bebé... Despertaste...¿Cómo te sientes?- contestó, tocándole la frente con sumo cuidado.

Sintió el frío de sus dedos apoyarse en su frente. Supuso que estaba ardiendo.

-Estoy bien. ¿Dónde estoy?

-Estamos en el hospital.

-¿Qué pasó?- preguntó confundido, viendo el suero que pasaba desde un tubito a su piel.

Su madre lo abrazó con lágrimas en los ojos, y le dio varios besos en la mejilla.

Se alejó y la miró confundido.

-Te extrañé mucho... Bien, no recuerdas lo que pasó, ¿verdad? Volvías del instituto, estaba lloviendo, y, cuando fuiste a cruzar la calle, un auto te atropelló... Quedaste en coma 5 meses.

Se quedó tenso sobre la camilla. Qué honesta y directa fue su madre, maldita sea.

Intentó procesar rápidamente la información.

¿5 meses? ¿Cómo había podido pasar tanto tiempo así?

-Uh, yo...

-Tranquilo, hijo. Está bien. Hunk y Pidge venían varias veces a la semana a hacerte compañía, también Marcos, Verónica y tus primos.

Lance tragó, nervioso, jugando con la cinta despegada de su piel.

-Ya veo...

Iba a preguntarle algo más pero un doctor irrumpió en la habitación.

-Hola, disculpen, debo examinar al paciente y debo cambiar sus vendas- dijo, acercándose a Lance -.  ¿Cómo se siente, joven McClain?

-Creo que ¿bien? Estoy confundido...- dijo, sintiendo una punzada en su cabeza.

¿Qué mierda pasaba?

Ya había escuchado a su madre, pero seguía perdido.

¿Keith lo olvidó? ¿No quiso saber nada más de él ni bien quedó internado?

¿Pidge y Hunk habrán cambiado algo de sus vidas mientras él no estaba presente? Deseaba verlos con todas sus fuerzas. Quería asegurarse de que estuvieran bien.

¿Pidge y Shiro ya estarían saliendo, oficialmente? Porque recordó que Pidge le había contado un poco sobre lo que había pasado con el mayor antes de que Lance salga disparado hacia el parque.

-Bien, te cambiaré las vendas- dijo el doctor, sacándolo del trance al que había quedado estancado. Lo miró -, dime si te duele. -Comenzó a quitarle la venda de la frente, dejando a la vista una herida a punto de cicatrizar. Había sido cerrada artificialmente y todavía no curaba, la verdad es que iba muy, muy lenta su curación. Miró al paciente -. ¿Duele?

Lance negó con cuidado.

Prosiguió a quitarle las de los brazos, esas estaban envueltas con mayor abundancia.

-¿Y éstas? ¿Duelen?

-Un poco- dijo, soltando un leve quejido. Su madre lo miraba fijamente.

-Bien, ahora las cambiaré. ¿Podrás aguantar?

Asintió.

-No se preocupe.

El doctor envolvió de nuevo su frente con vendas nuevas, al igual que a sus brazos.

-Más tarde cambiaré las de tu pecho, ¿bien? Buenas tardes - dijo antes de desaparecer nuevamente.

Lance esperó a que la puerta se cierre por completo.

-Mamá, uhm... ¿Keith no vino durante este tiempo?

Lo miró confundida.

-Keith Kogane- insistió.

Ella guardó silencio y él sintió como si lo estuviera matando.

La miró con insistencia y ella le devolvió una mirada confundida.

-Lance... ¿Quién es Keith?

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Último capítulo de la primera temporada :(
El lunes que viene arranca la segunda, estén Bien atentos :D

Mullet [KLANCE]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora