Capítulo 39

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Capítulo 39Incómoda:Día 186 del programa M

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Capítulo 39
Incómoda:
Día 186 del programa M.E.R: 15 de junio del 2015

3:30 pm

Para Cloe Nicols —alias, la friki de las margaritas —, el sentirse incómoda frente al mundo en general era algo completamente normal en su día a día. Resultaba común para ella no sentirse a gusto en muchos lugares, sobre todo cuando se veía al espejo y se daba cuenta de que su reflejo estaba muy lejos de alcanzar su meta soñada. Así que su cuerpo, que debía ser un santuario, era el lugar que más la incomodaba.

No obstante, había instantes en los que ella olvidaba esa incomodidad. Cuando jugaba videojuegos, por ejemplo; o cuando les explicaba a las margaritas alguna trama de una historieta a pesar de que ellas no entendían nada. Descubrió que le gustaba la biología y las ciencias de la salud gracias a Derek, quien fingió decepción de tutor porque ella fue incapaz de fijarse en la física antes que en aquella rama. En fin, eran pequeños momentos en los que olvidaba que su cuerpo no era perfecto. Segundos en los que ignoraba el dolor en su estómago, a sus labios quebrados, y a su cabello teñido desprenderse de su cuero cabelludo...minutos en los que estaba bien ser una margarita.

Pero no eran eternos.

—¡Cloe! —Rachelle la encontró en medio de su caminata por los pasillos de la escuela. Ya que las clases acabaron por ese día, ella tenía planeado ir a Sweets para unas lecciones de química con Derek, pero escuchar su nombre bastó para detenerla.

Cloe volteó a ver a su mejor amiga, quien venía hacia ella acompañada de Cam. Solo en ese entonces, se dio cuenta de que casi no los había visto en varias semanas. Estuvo tan ocupada con el programa, estudiando y pasando tiempo con las margaritas, que se olvidó por completo de ellos. Sonrió al encontrarlos y recibió a su amiga en un abrazo.

—¡Hola, chicos! —exclamó ella, con una sonrisa que torturaba a sus labios rotos y adoloridos —. ¿Qué ocurre?

—No ocurre nada —dijo Cam, mirándola con una ceja alzada —. ¿O es que acaso tiene que ocurrir algo para que Chelle y yo queramos hablar contigo?

—Pues creí que...

Ella se prohibió a sí misma pensar que, de hecho, esa era la primera vez que ellos la buscaban a ella y no al revés. Se sonrojó un poco ante la vergüenza de si quiera considerar eso ¡Cam y Chelle eran los amigos perfectos! ¡Por supuesto que no necesitaban una razón para buscarla! A ellos le bastaba por el simple hecho de ser ella...

—Tienes razón, amor —ella se aferró a la cintura de su novio y le sonrió con inocencia —. Lo siento, no quise darles a entender lo contrario.

—Lo sabemos —dijo él —. Tú sueles decir cosas que nunca entendemos.

—Eso es cierto —concordó Rachelle, meciendo su perfecta cabellera al ritmo del asentimiento de su cabeza —. Trata de pensar antes de hablar, Clo. Es mejor cuando estás callada que cuando hablas y dices cosas como esa. Tómalo como un consejo, amiga.

Margaritas || P.E #1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora