Capítulo 52
La margarita más dañada:
Día 359 del programa M.E.R: 5 de enero del 201610:30 am
Cuando Margaret se refirió a Lilian cómo la margarita más dañada de su jardín la primera vez que se vieron, no lo hizo por lástima o por darle prioridad. Todas las margaritas llegaron lastimadas, la diferencia con Lilian era que ella creía merecer el dolor. Sanne no supo que estaba enferma hasta que descubrió lo mucho que se había distorsionado su manera de ver al mundo gracias a comer sano. Dalia no admitió su enfermedad hasta notar que ella era la que más se insultaba. Y Cloe tuvo que darse cuenta de que había llevado muy lejos su envidia en el instante en que temió por la seguridad de alguien a quien quería, solo así descubrió su anorexia.
No obstante, Lilian sabía que vomitaba. Siempre supo que estaba mal, pero sentía que estaba bien. Se obligó a llenarse de dolor porque creía merecerlo, y eso hizo que sus pétalos se marchitaran con rapidez.
Era la tendencia a lastimarse lo que estaba destruyendo a Lilian.
Derek, quien se había quedado paralizado luego de ser alejado por Lilian y de que ella se marchara, sacudió su cabeza y organizó sus ideas. Sabía que Lili estaba hecha trizas, era la primera vez que la veía llorar en cuatro años. Aunque eso no fue un llanto como tal, tan solo fue una lágrima.
Una lágrima que representaba torrentes, ríos, lagos, mares...era una lágrima de Lilian, suficiente como para preocuparle en exceso.
El hombre que le había hecho daño estaba justo detrás de él. Sintió la tentación de voltearse y estamparle un puño en la cara a Harry. No obstante, su preocupación principal era Lilian. No iba a detenerse a destrozarle la cara al tipo —cosa que resultaba imposible dado a su poca fuerza —, cuando debía correr hacia Lilian y envolverla en un abrazo. Quería limpiar sus lágrimas, decirle que la amaba y que dejara de pensar en que él podría abandonarla. Así que decidió dejar a un lado molestia hacia el padre de su novia e ir a buscarla.
Hasta que alguien lo detuvo.
—Alto ahí, nerd —Cloe se interpuso en su camino e impidió que él alcanzará la puerta.
—Friki, déjame ir —Derek miró a su amiga con desesperación. Trató de esquivarla, pero ella lo detuvo —. Cloe, Lilian me necesita.
—No, tú la escuchaste: te quiere lejos, Derek —ella lo tomó por los hombros y lo miró con delicadeza —. No te ofendas, nerd, pero eres el menos indicado para ir con ella en este momento.
—¡¿Qué?! ¡¿De qué hablas?! —alzó la voz —. ¡La conozco mejor que nadie! ¡Yo la amo, Cloe! ¡Claro que me necesita!
—Pero estás alterado —ella trató de razonar con él —. No estás pensando con claridad.
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Margaritas || P.E #1
Teen Fiction"Las margaritas son frágiles, delicadas, sencillas..." Quien cree eso, es porque no sabe lo que sabe la doctora Margaret A. Wallace: Ella, especialista en desórdenes alimenticios y problemas psicológicos, sabe que el mundo en realidad es un gran jar...