Capítulo 42
Me quiere, no me quiere:
Día 210 del programa M.E.R: 9 de julio del 20157:00 pm
Desconozco, así como el resto del mundo, quien inició la tradición de arrancar pétalos de margaritas para tratar de adivinar si el amor que quieres te corresponde, pero fue una pésima idea. El número de pétalos en una flor es inexacto, así que el resultado puede ser cualquiera. Aunque era de suponerse que un "juego" tan absurdo se hiciera tan cliché y popular. Después de todo, a las personas nos gustan las cosas así: que tienen altas probabilidades de fallar. Es como si fuéramos adictos ilusionarnos. Somos tan masoquistas como un enamorado que busca flores en plena ventisca de invierno.
Ahora bien, regresando a la historia...Las luces, el sonido, las decoraciones, los adolescentes, sin duda no era el lugar para cuatro margaritas. No podían negar que su entorno lucía bien con el tema de "luces a media noche". Toda la cancha de baloncesto de la secundaria estaba repleta de faroles, lo que creaba un entorno casi mágico. Eso sí, lo demás arruinaba el encanto.
—Odio estos tacones —se quejó Lilian apoyándose en Dalia para acomodarse los zapatos—. No sé cómo lograron convencerme de traerlos.
—Aguanta, que te ves linda en ellos —aseguró Cloe —. Además, te sientan bien esos centímetros extra.
—Déjame vivir con mi metro sesenta, soy feliz con él —aseguró enderezándose con cuidado. Era inexperta en esa clase de calzado, así como en esa clase de fiestas.
Dada la rápida decisión de asistir a ese lugar, Dalia, Sanne y Lilian portaban atuendos sencillos comparadas con el resto. La primera, traía un vestido naranja y rosa estilo franela, que llegaba hasta sus rodillas. La segunda, un vestido rojo terracota caído, más corto que el de Dalia, que hacía juego con su labial potente. Y la tercera, un vestido blanco prestado, de espalda descubierta y escote alto, mucho más cortó que el de las otras dos.
En cuanto a Cloe, traía el vestido largo color azul que había escogido meses atrás. Era sencillo, con tan solo un hombro. Sus huesos se marcaban, pero la poca iluminación jugo a su favor, ocultando aquello. Las cuatro caminaron hacia el lugar donde servían ponche, solo porque ahí había menos personas. Les ofrecieron una y otra vez bebidas, pero ninguna aceptó.
Aún estaban aclimatándose a ese ambiente tan...peculiar.
—¿Dónde están Cameron y Rachelle? —le preguntó Sanne a Cloe, extrañada de que su novio y mejor amiga no hubiesen aparecido aún.
—No lo sé —dijo Cloe revisando su teléfono —. Les mandé mensajes, pero no contestan.
Dalia y Lilian intercambiaron miradas de alivio. Mientras más lejos estuvieran esos dos, mejor para ellas. Las pocas palabras que lograron intercambiar fueron suficientes como para concluir que no eran de su agrado. "Miss simpatía", bautizada así por Sanne, les resultó demasiado superficial a simple vista. En cuanto al novio de Cloe, había algo que no terminaba de encajar en él. Sin embargo, no sabían que era.
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Margaritas || P.E #1
Ficção Adolescente"Las margaritas son frágiles, delicadas, sencillas..." Quien cree eso, es porque no sabe lo que sabe la doctora Margaret A. Wallace: Ella, especialista en desórdenes alimenticios y problemas psicológicos, sabe que el mundo en realidad es un gran jar...