POV: Liam "Sabe que es un traicionero" Connor.
Los enormes ojos de Candace me observaban con detenimiento, recelo y decepción.
Traté de respirar profundo, con la esperanza de que el oxígeno trajera consigo una alta dosis de valor.Detestaba esto: odiaba saber que la iba lastimar, pero necesitaba decirle la verdad; que ella supiera y me diera otra maldita oportunidad.
—¿Quieres que hablemos en la sala?—Pregunté, queriendo ganar un poco más de tiempo.—Hace un rato que se fueron todos
—Lo único que quiero es que cuentes todo justo ahora, Liam.—farfulló, moviéndose hasta que sus piernas quedaron cruzadas. Su cabello castaño estaba revuelto, y me encontré fascinado al descubrir que cuando despertaba sus ojos tenían un tomo verde aceitunado.
Boté una bocanada de aire, y palpé mi frente; un débil dolor empezaba a golpear justo ahí.
—Bien.—Cedí, intentando tragar el nudo de ansiedad.—Candace, la otra vez en la cafetería, cuando Danna llevó ni sudadera.—Hice una pausa, sin comprender bien como debía continuar. Me puse de pies, y empecé a caminar por el reducido espacio.—Mentí. Sí estuve en si casa la noche anterior.—Me detuve y la miré a los ojos.—Solo nosotros dos; Ethan no estaba ahí.
—El día de fui a tu casa para pedirte una oportunidad.—Susurró para sí misma.—La viste después de besarme y decirme que íbamos a estar bien.
Vi como el color de su piel bajó por lo menos un tono, y su mirada se volvió la de una persona herida. Se quedó en silencio unos segundos, llevando su vista a sus manos.
—¿Desde cuándo se ven?—Musitó la pregunta. Parecía tan pequeña y abandonada en ese momento, que me odié a mí mismo.
Tragué saliva.
—Ella y yo somos mejores amigos por...—Comencé a decir.
—¡¿Desde cuándo?!—Bajó de la cama y me miró.—No me vengas con el cuento de que son amigos.
—Llevo años yendo a verla todas las noches que puedo.—Agaché la cabeza.—Tengo que saber que estas bien.
—¿Solo vas a verla?—Escupió.—Mírale, Liam. ¿Solo la visitas y es todo?
Este ere el momento, aquí iba a destrozar cualquier oportunidad que haya tenido con Candace. Era un imbécil
—No.—Acepté.—Nos hemos acostado.
Candace dio un traspié hacia atrás, como si le hubieran dado un puñetazo directamente en el rostro. Era como si justo ante mis ojos viera como se quebraba el caparazón de confianza que había entre nosotros.
Las lágrimas llenaron su mirada, e instintivamente di un paso hacia adelante, con la intención de acercarme a consolarla. Pero ella hizo un ademán de querer huir y me detuve. Envolvió los brazos al rededor de su estómago, y volvió a sentarse en la cama.
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Ni Te Quería Tanto
Teen FictionEN CORRECCIÓN. El chico que me gusta me ha confesado que esta enamorado de mi mejor amiga.... Esto va a estar jodido. •~•~• Mientras él me hablaba de lo profundamente enamorado que estaba de Emma, un agudo dolor atravesó mi pecho. En ese momento no...