Epílogo VIII

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Pim


El sol resplandece, después de un breve chubasco en la madrugada. Todos los invitados están ataviados para desayuno y playa.

Los Van Driss, los Vogt, las gemelas, los Riquelme, Baldomero, el gran Roger, llevando en brazos a su último hijo, Jules y un Ruud medio vivo. Los Balaguer y los Gunnarson-Oller, resaqueados y sentimentales por el logro entre logros del pianoman.

Nos despiden con las manos en alto...

Anaís, de la mano de Luus y Ardjan, seguida por Manchis y Coronita, nos acompañan hasta la camioneta.


– 1338 –

_Mami, te quiero..._suelta la mano de Luus y la jalonea hasta su estatura, la abraza y la besuquea. Ana me mira de reojo y me hace sentir su encrucijada... Quiere llevarla con nosotros.

Como dicen por estos lares, tampoco, tampoco.

_Ana is, tienes que cuidar a la abuela_actúo rápidamente_ ¿Quieres que la abuela se vuelva a casa porque la dejaste sola?

_Yo estoy a cargo de la abuela_se desenrreda de la madre, maullando.

_Pim...

_¿No querrás cargar con la suegra en la luna de miel?_la acorralo_. Te queremos, renacuaja_le mando un beso volado y me apuro meterla a la camioneta y salir de aquí.

_No me gusta dejarla sola...

_No estará sola y sólo serán pocos días.

_¿Y a dónde se supone que vamos ahora?

_¿Me lo preguntas a mí, Popje?

_Cogeremos el velero, es un hecho_juega con su aro , alrededor de su anular y la sensación viene a mí...


"No me acostumbro aún".

_Si yo me acostumbré, tú también lo harás_le enseño mi aro, sin dejar de mirar el parabrisas. _Houben, te dije...

_Lo siento..._tarde me doy cuenta de la metida de pata.

_¡Si no puedes controlar la infidencia por lo menos controla la lengua!_odia ser consciente lo cerca que estoy de sus pensamientos: en los bordes. Soy un espectador interactivo de sus sensaciones y de muchas de sus percepciones sensoriales; las buenas y las malas.. Y tengo la impresión que esta extraña aptitud irá más allá, rompiendo cualquier límite que se interponga en hacerme totalmente de ella, del mismo modo como mi amor rompe fronteras, día a día.

_Soy incontrolable_giro un segundo, arqueándole una ceja. 

_¿Cuántos días estaremos en el velero?

– 1339 –

_Secreto.

_Anaís...

_Luus_ hace una mueca. Le cuadra y no le cuadra. La relación entre ambas es buena y contra cualquier pronóstico. Son mujeres fuertes y vulnerables a gran escala. Combaten día a día enfermedades compulsivas con tenacidad y arraigo. Luus lleva sobria casi una década y no sólo eso, es directora y consejera de Alcohólicos Anónimos en Zuid Amsterdam. Ana no ha vuelto a tener una gran crisis desde que volviera a nosotros. Ahora combate sus demonios corriendo, aunque resignada a su eterna sombra. Y la cabaña... Bueno la cabaña se ha convertido en el cuarto de juegosceleste de nuestra renacuaja y todos sus amigos.

En El Bosque, ClementinaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora