Capítulo 15

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- Realmente lo siento, Co. Tu hermano se acercó a nosotros y nos interrogó respecto a ti, pero no supimos que decir ni como cubrirte ya que tenía una mirada de muy pocos amigos. Es como tú pero una versión masculina. ¡Da miedo! - Lucy se apresuró en disculparse antes de saludar al día siguiente por lo sucedido el día anterior, pero no estoy molesta con ella ni siento rencor.



Estuvo durante casi toda la mañana disculpándose conmigo como si me hubieran encerrado en prisión por su culpa, a pesar de que yo ya le había explicado que me las había arreglado para evitar tener una discusión grave con mi hermano. Recién a la hora de almorzar, se le pasó.



- ¡Vamos a comer Pizza! Y como nosotras no tenemos clases esta tarde, podemos tardar todo el tiempo que queramos. - Saltaba ella al rededor de Luka y de mientras nos dirigíamos al estacionamiento del campus para ir por la motocicleta de Luka, una Harley Davidson negra muy bien cuidada. No conozco demasiado sobre motocicletas, pero evidentemente está es muy buena.



Según él, su motocicleta es como su hija; pero yo estoy bastante segura de que ni a su propia hija podría llegar a tratarla con tanto cuidado y afecto.



- Hola, bebé. - Saludó a su vehículo de dos ruedas con tanto cariño, que cualquiera podría pensar que nos lo está diciendo a alguna de nosotras.- ¿Cómo hasta estado? ¿Te trató bien el sol?



- Luka, das vergüenza. - Se quejó su hermana cruzada de brazos ante él, y yo reí sin poder evitarlo. No porque me esté burlando de él, sino porque yo haría lo mismo si tuviera un vehículo totalmente propio.



Si tuviera un Lamborghini bañado en oro como los que he visto en Dubái, sería mucho peor que él.



- ¡Ofendes a Karen! Luego ella no querrá llevarte. - Se refirió a la motocicleta. Él la llama Karen.



- ¡Dios! Llévanos de una vez por todas, idiota. - Lo golpeó con su casco, y luego me lo entregó a mí.



- Yo...



- Tú irás con él primero, y ve ordenando una pizza grande con mucho queso, albahaca y peperoni, y otra mediana con piña. Luego me llevará a mí.



Luka se subió sobre la motocicleta y me miró con una sonrisa audaz, mientras esperaba a que yo subiera detrás de él.



- Sube, nena. - Ronroneó coqueto e hizo sonar el motor como si realmente estuviera coqueteando.



- No seas tarado. - Lo golpeé en el brazo y, después de colocarme el casco, subí detrás de él y me aferré con fuerza a su cintura.



- Procura no partirme a la mitad. - Bromeó.



- ¿Podrías ir un poco más despacio de lo que acostumbras al arrancar? Jamás he andado en una motocicleta. Lo curioso es que comprendo muy bien la teoría sobre cómo manejarla, pero nunca he tenido ni me he subido en una.



Creo que olvidé mencionar este pequeño detalle, no solamente a Luka y Lucy sino también a Jey... Aún que dudo que a él pueda importarle demasiado.



- Descuida. Solo relájate y verás que te gustará. - Arrancó con tanta fuerza que por un momento creí que caería hacia atrás. Tuve que aferrarme a su cuerpo con uñas y todo, porque sus giros eran tan bruscos que podría jurar que, si nos llegamos a inclinar tan solo unos cuantos grados más, besaré el suelo.- ¡Relájate! - Exclamó.



Al cabo de unas cuantas calles, mis nervios se habían esfumado y ya no sentía la necesidad de vomitar. Es más, creo que me gusta.



- Tiene que enseñarme a conducir una motocicleta. Bueno... en realidad conozco un poco la teoría, pero jamás me he animado a conducir una realmente.

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