Darien Morris.
Su dulce fragancia a lavanda choca contra mi nariz mientras me acerco a su lado. Las preguntas amontonadas en mi mente desaparecen durante un segundo mientras la admiro su belleza. Esta sentada en el mueble de la sala con un libro en manos, tiene el pelo suelto y sus labios pintados de un rojo pasión.
No quiero creerlo. No quiero creer que Selena me haya robado pero...
Ella es la única en esta mansión con el valor de hacer tal cosa. Ella es la única que no desea estar a mi lado, es ella quien me desea la muerte. Si no fue ella, ¿quien mas pudo ser? A pesar de que mande a revisar su habitación no fueron capaces de encontrar nada. Absolutamente nada que me perteneciera.
— ¿Qué quieres, Darien? — su voz suave, dulce y fría cuestiona mientras sus ojos se niegan a toparse con los míos.
— ¿Donde esta? — mi pregunta no parece tener ningún efecto en ella.
— ¿El que, exactamente? — su desinterés en la conversación provoca que mi mandíbula se tense.
¿Por que nunca me dirige su mirada mientras hablamos? ¿Realmente no le interesa nada de lo que diga?
— Sabes muy bien de lo que estoy hablando, Selena.
Un suspiro sale de sus labios rojizos mientras cierra el libro y me voltea a ver, - No, no se de lo que hablas. ¿Cómo se supone que sepa si ni siquiera me dices lo que buscas?
— Claro que lo sabes, Selena. ¿Donde están los documentos que robaste?
Espero una reacción a mi pregunta. Una carcajada o una cara de miedo, acompañada de escalofríos y sollozos. Pero nada de eso pasa. Selena no se mueve ni un centímetro, solo sus labios que forman una sonrisa divertida. Mi corazón se salta un latido y luego, se acelera.
— ¿En serio? ¿Entonces, tienes evidencia de lo que estás diciendo, Darien? ¿O solo viniste aquí para joderme la vida más? — un destello de odio brilla en sus ojos con fuerza.
Es cierto. Ella tiene razón. No tengo ningún tipo evidencia para acusarla. Solo el estúpido sentimiento de que ella entró en mi oficina y se robo esos documentos de una caja fuerte con una contraseña que dudo, ella hubiera conocido. Aun así lo se, su mirada con un destello de odio y diversión entrelazados lo dicen todo. Ella me esta retando, quiere ver que soy capaz de hacer en esta situación.
— Tienes razón, no hay evidencia que te señale como el culpable pero, tu y yo sabemos muy bien quien es el culpable, ¿verdad?
Una risita sale de sus labios antes de volver a abrir su libro.
— No lo se Darien, no tengo ni idea de quien pudo haberme alegrado el día.
Otra risita sale de sus labios y sin darme cuenta de cuando pasa, golpeó con fuerza su mejilla dejándola de un color rojo intenso. Su cara volteada debido al impacto se mantiene inmóvil y eso, de alguna manera, me asusta más. Su mano izquierda se alza lentamente hasta tocar la zona golpeada con la yema de los dedos. Un fuerte sentimiento de culpa y arrepentimiento se instala en mi pecho.
— Ya me parecía anormal que durante todo este tiempo, no me hubieras pegado ninguna vez. ¿Qué? ¿Te aburriste de esperar? — su voz indiferente y sarcástica provoca que me de cuenta de cuanto desea mi muerte.
Aunque siendo sincero, ya no es nada nuevo. Se que si de ella dependiera hace mucho tiempo estaría tres metros bajo el suelo. Por ello, no me debo permitir ser tan débil frente a ella.
— No se te olvide, Selena. Quien esta a cargo aquí soy yo, no tú — advierto en tono indiferente mientras me dirijo hacia la puerta.
— Entonces, que no se te olvide Darien, que tienes una bomba del tiempo a tu lado. Una que en cualquier momento podría explotar y dejarte sin vida — su advertencia provoca que pare durante un segundo de manera automática. Suspiro.
— Sin embargo, eso dependerá de tu habilidad Selena. Así que dudo mucho que algún día explotes.
Y sin esperar una respuesta salgo de la habitación de un portazo. Camino por los pasillos mientras, con el dorso de la mano, frotó mi frente. Una punzada atraviesa mi cabeza y me veo obligado a parar un momento. El dolor de cabeza me esta volviendo loco y mi cuerpo a se siento adormitado y pesado. Intento pensar con claridad, pero hay demasiadas cosas en mi cabeza como para pensar con tranquilidad. Estoy completamente confundido. Por lógica y razonamiento puedo decir que ella es la responsable de el robo. Al mismo tiempo, por las mismas razones puedo decir que no tiene sentido que ella sepa algo como la contraseña de la caja fuerte. Que haya llegado a mi oficina sin darse cuenta nadie y que no haya ninguna grabación de ella en las cámaras cerca de la oficina.
Pero el problema en si seria, ¿a quien planea darle esos documentos? Todo mi imperio construido por mi padre podría desaparecer en un segundo con esa información.
No se que pensar. Una parte de mi dice que fue Selena y la otra, desea que no haya sido ella. Porque de lo contrario no podría perdonarla y temo, su castigo podría matarla y eso es algo que no deseo hacer. Sin embargo, estoy siendo empujado por ella hacerlo, ¿acaso me quieres matar de culpa con tu muerte, Selena?
Porque eso seria lo que pasaría, morirá de culpa por haber matado a la persona que amo.
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Hola mis amorzhes!!!
Cuanto os he extrañado, mis pequeños pecadores *O*
Naaa, es mentira. Yo se que ustedes son muy buenas personas. ¡Gracias a todos por leer y escribir comentarios! No saben cuanta felicidad me traen al saber que les gusta mi historia. En realidad, agradezco a Dios por su apoyo.
Disculpen la tardanza, en estos días publicare otro capitulo, porque la semana que viene tengo exámenes. ¡Espero disfruten!
Clai♠
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An Innocent Sin [Original]
Mystery / ThrillerPerturbado y loco, con un terrible temperamento y sin paciencia. Morris dice amarme pero, yo no lo creo. Todos los días exige lo mismo. Todos los días respondo con lo obvio. Deseoso de afecto me pide darle lo que nunca obtendrá ni en sus sueños. Y...