-¿Qué es este lugar? No me siento cómoda aquí. Por favor, quiero salir- dices acercándote a la Carrie del espejo.
-¿No sabes dónde estás? ¿No reconoces la propia representación de tu cabeza?
No sabes como interpretar lo que te están contando, es totalmente absurdo, irreal. Y sin embargo, sabes que es totalmente creíble...
-Por favor, no me importa cómo ni lo que tenga que hacer, solo quiero salir de aquí...
La imagen del espejo se acercaba cada vez más a la superficie, como una imagen en 3D, pareciera que fuera a salirse en cualquier momento.
-¿Por qué tan deprisa? ¿No estás aprendiendo nada importante?- te pregunta.
-No... Sí... No sé... - respondes con total sinceridad. -Estoy aprendiendo, sí. Pero no me siento cómoda estando aquí. Solo quiero salir de aquí. Irme.
Por un momento, la Carrie del espejo comenzó a temblar nerviosamente, como llena de ira, pero enseguida volvió a su estado habitual...
-Puedo ayudarte. Solo ven, acércate, toma mi mano.
La imagen del espejo saca el brazo hacia el exterior, tendiéndote su mano corpórea. Temblorosa, das unos pasos para acercarte a ella y alargas tu brazo. Con un rápido movimiento la imagen te agarra por el brazo con fuerza.
-¿Por qué?- te pregunta con ira.
-¿Qué está ocurriendo? ¡Suéltame! ¡Me haces daño!
-¿Por qué quieres llegar a la meta sin recorrer el camino?- dice mientras te agarra cada vez más fuerte.
-¿Qué? ¡Déjame! ¡Me he arrepentido, no quiero nada de ti! ¡Suelta!
Peleas todo lo que puedes, intentas escaparte con todas tus fuerzas, pateas el espejo... pero nada funciona, no hay manera posible de poder liberarte.
-Podría haber sido genial, Carrie... Podrías haber aprendido a aceptarte, podrías haber llegado tú sola a la meta... solo te hacía falta el valor necesario para emprender el viaje.
-¡No puedo!- comienzas a llorar. -No puedo hacerlo. Quiero que todo termine, por favor. No quiero sentirme mal y no puedo hacer nada para evitarlo...
-¡No lo has intentado! ¡Podrías haberlo logrado!
-¡DEJA DE GRITARME!- contestas con todas tus fuerzas. -¿Te crees que no lo he intentado ya? ¿Por qué crees que no puedo hacerlo? Cada vez avanzo un poco hay mil cosas que me echan para atrás... puedo aceptar lo que siempre he negado de mí, pero esto... me supera, no puedo más... quiero salir... sentirme bien...
La imagen del espejo afloja un poco, te mira con... ¿compasión?
-No te preocupes. Vas a dejar de sentirte mal.
Con un fuerte y ágil tirón, te arrastra hacia el espejo.
-¡Para, por favor!- le suplicas- ¡Ya no quiero esto! ¡He cambiado de opinión!
-No... No lo has hecho... Nunca lo haces... Y nunca lo harás.
Tu reflejo te lanza una última mirada y, con otro tirón, te hace tocar el espejo. El solo roce de tus dedos hace que la superficie reflectante comience a absorberte, lenta pero inevitablemente. Al cabo de unos segundos no eres más que el reflejo dentro de el espejo...
-FIN-
Este es tu final. Carrie no ha podido terminar de aceptarse a sí misma. El proceso puede ser muy complicado... Por suerte, no tendrá que preocuparse nunca más por volver a sentirse mal consigo misma...
Si no te ha gustado este camino, o el final te ha sabido a poco, prueba a volver a empezar y tomar distintas decisiones, ¿quién sabe lo que puedes lograr? ¡Buena suerte!
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Maldición Onírica -Elige tu propia aventura-
FantasíaSe dice que los sueños muestran nuestras preocupaciones más íntimas. Cuenta una leyenda que grandes preocupaciones conducen a un mundo de los sueños del que es muy difícil despertar, tanto, que hay quien incluso afirma que es posible quedarse atrapa...