Amor prohibido "ICHIRUKI"

Capitulo 58

Hola queridos lectores aqui les dejo otro capitulo de esta historia espero que les siga gustando. Sin mas a leer.

***Pov Rukia***

- ¡Rukia no lo hagas! ¡ no te cases con El! - grito Ichigo con dolor en su rostro.

- ¡Rukia hija. No lo hagas! - dijo en voz alta Otoosan, que habia llegado junto a Ichigo.

Sorprendida los mire con los ojos bien abiertos... ellos estaban agitados como si hubieran corrido una maraton. Kami agradezco que otosan fuera tratado por mi nii-sama y ya estuviera mejor. Con ese pensamiento. Mi kokoro dio latido.
Como supieron que hoy me casaria con Aizen. Si ayer les llame y les dije a Ichigo y otoosan que estaria con Rangi hoy... Ella nunca me delataria. Pense, buscando descubrir como se llegaron a enterar que hoy me casaba... Esto no estaba en mis planes... Pero quizas es lo mejor. Tengo que lograr que Ichigo me odie. Él tiene que olvidarme. Pero una carcajada me saco de mis pensamientos y me di cuenta de la verdad. Y  lo impredecible que podria ser el hombre que estaba a mi lado. El lo hizo. El fue el que les informo de la boda.

Mire a Aizen que seguia riendo muy divertido ante el drama que se acaba de presentar ante sus ojos. Ignore a Ichigo y a mi padre y firme el registro sin vacilar. Sin dudar Rukia. Esto es por la familia. Me di valor mentalmente.

Aizen sonrio al verme firmar - Rukia- chan. No estas contenta de que tu padre y Kurosaki Ichigo vinieran a bendecir nuestra union.

- ¿Rukia por que? - pregunto Ichigo cayendo de rodillas.

Mientras Otoosan nos miro con tristeza a mi y a su hijo - Rukia- chan porque te cansaste con el. ¿Que paso con el amor que me dijiste tener por mi hijo?

Mire al hombre que me crio y dije lo mas superficial y fria que pude  - en realidad estaba equivocada. Me di cuenta que amo a Aizen. Por eso acepte ser su esposa. Asi que no hay necesidad de que te angusties padre.
Ichigo estaba en silencio sin decir nada mirandome. Con dolor en su mirada.

Ese dolor que en sus ojos color miel, me apuñalaba mi corazón... Perdóname amor mio pedi en silencio.

Yo mire a ichigo sin mostrar ni dudas, ni dolor, nada. Lo mire sin vacilación, sin apartar la vista de sus bellos ojos color miel. Que hace dos dias me vi reflejada en ellos,  con ojos de amor; y que ahora solo podia vislumbrar en ellos dolor, desprecio y un atisbo de odio. Todos esos sentimientos dirigidos a mi y a la persona que sonreia a mi lado tratando asi de incitar a Ichigo...  Esa mirada quebro mi alma que ansiaba correr a sus brazos y decirle que esto lo hago por él... ¿Pero que ganaria con eso?... Sé muy dentro de mi, que si me quedo a su lado, solo habra dolor para él... Eso lo sé. Pero aun asi, me duele el corazón. Con tranquilidad cerre mis ojos unos segundos para luego poner la fria expresión que herede de mi madre. Despues de todo algo tenia que aprender de ella. Aunque no estoy orgullosa de eso.

- Rukia. ¿Tu de verdad ya no me amas? - me pregunto Ichigo poniéndose de pie.

Manteniendo mi fria mirada dije sin emocion - en realidad nunca te ame. Solo estuve confundida.

Ichigo dio un paso adelante antes de ser detenido por nuestro padre. Que me miro a los ojos. Con esos ojos oscuros que parecian absorber cualquier cosa en una oscura oscuridad infinita. Esos ojos que desde niña podia leer mi alma igual que mi padre biológico y mi nii-sama.
Otoosan cerro los ojos y miro a su hijo y luego deposito su mirada franca en mi. Como si hubiera descubierto algo... Al comprender lo que acaba de suceder senti que por unos segundos mi expresion fria se tambaleba.

- Esto es lo que realmente deseas Rukia- chan - dijo otoosan sin expresar sentimiento alguno.

- Si - fue lo unico que le dije al hombre que me brindo una familia llena de amor. Al mirar sus ojos negros.