CAP 16. EL PELIGRO DEL NORTE

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POV NARRADOR

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POV NARRADOR

-Apresúrate con mi alimento, no tengo tu tiempo- le gritó Halvard a uno de los cocineros de la aislada y sobrepoblada isla –no sé cuánto vamos a resistir esta miseria- se quejó con uno de sus compinches mientras se sentaban a esperar sus platones

-Disculpa si mi hospitalidad no ha sido suficiente para ti- le recriminó la líder de la tribu Avigg.

-Pues ha dejado mucho que desear- le respondió sarcástico el chico haciendo que la mujer se enfurezca más, desde que los sobrevivientes de Berk llegaron a la isla, la jefa ha tenido en la mira al egocéntrico y mal educado hombre.

-En ese caso, permíteme ofrecerte una barca para que te vayas al demonio cómodamente- lo retó –que no se te olvide, estas en mi isla, bajo mis reglas y una de ellas es la educación... así que abstente de pensar que tienes derecho a hablarle así a cualquiera de mis habitantes, porque aquí no eres el heredero al trono de Berk... solo eres un imbécil que llegó con los sobrevivientes-

Halvard desenvainó su espada con la completa intención de dañarla hasta que la fuerte mano de un herrero lo detuvo

-Suficiente- le ordenó Bocón mientras todos ponían atención y veían amenazantes al heredero –estas en desventaja- Halvard de mal humor se soltó de su agarre y llevó el filo de su espada al cuello del herrero

-Que no se te olvide, tu aun estas a mi mando- le dijo entre dientes

-Yo estoy al mando del jefe de Berk... y este sigue siendo Estoico- le recriminó haciendo que Halvard soltara una sonrisa burlona

-El imbécil de Estoico junto al resto de los líderes se pudren en los calabozos del Valhalla... y si no comprendes tu lugar, los alcanzaras muy pronto- le amenazó, momentos después abrió los ojos como platos y comenzó a bajar su espada cuando sintió el filo de un arma clavándose amenazadoramente en su cuello

-Y si no comprendes tú tu lugar en mi isla, probablemente llegues ahí más rápido- lo amenazó la mujer, mal humorado Halvard guardó su espada, vio con un rostro asesino a Bocón y salió de ahí

-No todos en Berk somos así- se disculpó Bocón por la penosa actitud que ha tenido Halvard

-Nunca entenderé por que un hombre sabio como Estoico lo nombró heredero... ni mucho menos cuando supo de Hipo le dejó aquel título-

-Simple... en un comienzo estaba enojado, y Halvard parecía una buena opción, y al final... Hipo no aceptó ser el heredero...- le respondió nostálgico -¿Ha habido noticias de el?-

-Ninguna, los mercaderes hace ya varias semanas lo vieron aparecerse en los mercados del norte, pero después de que Naddod llegara... nada, ninguna señal del Maestro Dragón-

-Conservo mis esperanzas en que está planeando algo...-

-Yo también Bocón, por el bien del archipiélago, espero que así sea- respondió respirando pesado Camicazi.

LA ESPADA Y EL HACHADonde viven las historias. Descúbrelo ahora