POV NARRADOR
Astrid caminó digna de entre todos los cazadores que la seguían con la mirada, caminando a su lado una dragona blanca uno de los tesoros que cualquier cazador podría cotizar, un Nadder albino, sobre el cielo, su enemigo desde hace años sobrevolaba vigilante el lugar, aquel furia nocturna que se negaba a permitir a la chica salir sin protección y que mientras su humano no pudiera hacerlo, él las protegería en su lugar.
Viggo ya había sido avisado, la estaba esperando y cuando esta entró a la carpa detuvo a su dragona mirando a Ryker su claro segundo al mando.
-Tengo un furia nocturna y una docena de nadders y pesadillas monstruosas sobrevolando el lugar, si tocas a mi dragona cualquiera de ellos te matará- le advirtió antes de sin darle derecho a réplica... entró.
***
-Alvin- murmuró Bjorg mirando al horizonte junto a Estoico -¿estás seguro?-
-Ni siquiera un poco- confesó –en él queda demasiado rencor, no creo que siquiera acepte-
-Lo que estamos haciendo...- se detuvo, Estoico comprendió su silencio
-Renunciaste a tu hija para tratar de protegerla, Finn renunció a su hermano por lo mismo, mi hijo casi renuncia a su vida por el mismo motivo... quizá por una vez... deberíamos dejarla a ella protegerse a sí misma-
-Irónico- dijo Ottar llegando a ellos –si la hubieran dejado aquí, igual se hubiera enamorado de tu hijo y hubiera ocurrido esto sin tanto drama en el camino- ambos padres sonrieron irónicos y se vieron con complicidad, conocían a sus hijos lo suficiente como para saber que de alguna manera, se las hubieran arreglado para llegar a ese justo momento con esa justa dosis de drama.
***
-Siempre es un placer enorme recibir tan buena compañía- la saludó invitándola con una seña a sentarse –aunque debo admitir que tu visita ha sido bastante sorpresiva- Astrid no se sentó, en cambio puso el mapa que Viggo le había dado tiempo atrás a Hipo sobre la mesa y lo expandió
-Vengo a aceptar tu trato-
-¿Debo preguntar en dónde está mí querido Maestro Dragón?- preguntó curioso
-Indispuesto... pero estoy yo- Viggo sonrió asintiendo y se levantó para ir hacia afuera de la carpa, Astrid lo siguió atenta con la mirada
-Lykke... trae a nuestros otros invitados- le ordenó sereno para después regresar a su lugar, segundos después, dos personas fueron aventadas al suelo amordazados y sujetos por cuevas –hace una semana los encontré liberando mi mercancía... descubrí quien interrumpía mis cazas, y no era necesariamente Hipo-
La mujer en el suelo miraba con atención a la chica, ella la conocía... era la chica que la dejó huir de Berk y que había visto a lado de su hijo.
-Respeto tus intenciones querida, pero mi trato caducó... y como podrás ver... no tengo ninguna necesidad de renovarlo...-
-Entonces te propongo uno nuevo-
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LA ESPADA Y EL HACHA
FanfictionUna apuesta divina, el bien y el mal jugando sus mejores movimientos, una diosa dispuesta a equilibrar la balanza. El corazón se fue de Berk cuando tuvo que elegir entre su amigo o su pueblo, el alma nunca tuvo elección. Pero el destino es sabio y...