Capítulo 24.

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—¿Por que vuelves con ropa que no es tuya?.—su madre inquirió.

—Es solo el suéter, Mamá.—Jungkook se quejó.

—No me hables así, niño.—su madre lo señaló—.Y ahora dime porque vuelves cambiado de ropa.

Jungkook rodó los ojos, subiendo sus pies al sillón en el que estaba sentado y girándose por completo a su madre, quien se encontraba a su lado, con una bata azul.

—Uno de mis amigos me tiró una botella de agua encima, y tuve que pedir que me dejaran algo.—explicó.

—La sudadera.—su madre estiró su mano.

—¿Es enserio, Mamá?.—Jungkook se quejó nuevamente.

—La sudadera.—repitió, apurándolo con la mano.

Jungkook suspiró, entregándole la bolsa que le había dado Jimin para colocar su sudadera. La mujer sacó la prenda y, ante el rostro atónito de Jungkook, la llevó a su rostro y la olfateó.

—No es alcohol.

—Claro que no, Mamá.—chilló, indignado.

Su madre suspiró, doblando la prenda y dejándola a un lado no importándole que estuviera empapada.

—Jungkookie.—la mujer acarició su cabello—.No quiero que pienses que desconfío de ti, hijo.—habló suavemente—.Es solo que últimamente estoy tan ocupada con el trabajo que apenas te veo y no tengo tiempo para hablar contigo.—dijo con pesar—.No se que está sucediendo en tu vida, y a veces me gustaría tener tiempo y hablar contigo.—le sonrió con cariño—.Por que he notado cambios en ti, y quiero poder hablar contigo, y que tu sientas confianza para hablar conmigo.

Jungkook suspiró recostando su cabeza sobre el pecho de su madre, dejando que esta acariciara sus cabellos—.Todo está bien, Mamá.

Su madre rió suavemente—.Ante todo lo que te he dicho, ¿Solo eso tienes para decirme?.

Jungkook se sintió mal—Yo...

—No te preocupes, cariño.—besó su coronilla—.Se que eres un buen chico y se que no te metes en problemas, solo quiero que sepas que si algún día quieres hablar conmigo, si lo necesitas, podemos buscar un momento para hacerlo.

—Gracias, Mamá.—Jungkook besó su mejilla—.Se que puedo contar contigo, se que si no estás en casa no es porque no quieras, si no porque nos estas dando una vida a JungHyun y a mí.—la sonrió—.Y te estaremos eternamente agradecidos.

—Lo se, hijo, lo se.

Hubo un momento de silencio en el que simplemente se mantuvieron abrazados, sin palabras de por medio, dejando que el momento madre-hijo sea protagonizado por el silencio y sus sentimientos.

—¿Entonces, no hay nada que quieras hablar conmigo?.

Jungkook la miró, negando con la cabeza.

—Está bien.—su madre se resignó, levantándose—.Me iré a dormir.

Jungkook asintió, y mientras veía a su madre desperezarse para marcharse a su habitación, se dijo a sí mismo que no debía ser tan malo o tan difícil el poder hablar con su madre sobre sus sentimientos por otro chico, si lo había hecho con Junghyun, podía hacerlo con su madre.

—Espera, Mamá.—Jungkook la llamó antes de arrepentirse.

—¿Que ocurre?.—su madre se volteó a verlo.

—Yo...—Jungkook titubeó—.Puede que quiera hablar algo contigo.

Su madre sonrió tiernamente hacia su hijo, sentándose nuevamente a su lado y agarrando su mano.

Conquistando a Hyung. |Jikook| ✅Donde viven las historias. Descúbrelo ahora