Capítulo 28.

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El fin de semana había sido un horror, las imágenes del viernes no habían abandonado la cabeza de Jungkook y solo lo habían hecho sentir peor a cada segundo, a cada minuto, a cada hora.

Se había encerrado en su habitación poniendo de escusa que se encontraba mal para que su madre y su hermano no lo llenaran de preguntas que claramente el no quería ni tenía ganas de responder.

Parecía haber funcionado ya que tanto su madre como su hermano solo pasaban para asegurarse de que no necesitara nada, y en todas las ocasiones, Jungkook había fingido estar dormido para no tener que enfrentarlos.

El lunes había decidido no asistir a clases, el simple echo de pensar en encarar a Jimin hacía que su estómago se revolviera por los nervios.

¿Jimin se acordaría de lo sucedido aquella noche?, y si era así, ¿Que pensaría?.

Solo pensar en ello hacía que su cabeza doliera, no quería enfrentarlo, temía enfrentarlo.

¿Que se supone que debía decirle si Jimin pedía una explicación por su actitud? ¿Que estaba enamorado de el?.

No. Ni pensarlo.

Aquellos pensamientos lograron que Jungkook faltara el martes también, demasiado asustado como para asistir y enfrentar a Jimin, no podía solo decirle que estaba enamorado de el y que lo quería junto a el para siempre.

Yugyeom lo había llamado preocupado, y le había propuesto ir a visitarlo y hacerle compañía pero Jungkook se había negado, rechazando la insistencia de su amigo con la escusa de que necesitaría los apuntes de alguien para mantenerse al día con las clases.

El miércoles había corrido la misma suerte y Jungkook se había refugiado en su habitación, alegando que sentía algo de congestión y que aquello lo incomodaría para atender las clases, y su madre no había puesto pegas ya que el bienestar de su hijo era primordial.

Aunque su hermano, para su desgracia, no era tan ingenuo y lo había calado.

Por lo que a media mañana había entrado en su habitación sin si quiera llamar a la puerta, encontrándolo sentado en la cama, leyendo un libro.

Yugyeom le había dicho que el profesor de literatura había pedido que realizaran la lectura para un pequeño examen que realizarían la siguiente semana.

—Jungkook.—la voz de su hermano sonó demasiado dura.

—Hyung.—Jungkook tragó saliva, intimidado ante la mirada de su hermano—.¿Que sucede? ¿Por que no estás en la universidad?.

Junghyun se sentó a un lado de la cama, muy cerca de Jungkook—.Las preguntas las haré yo.

—¿Que?.—Jungkook lo miró confundido.

—Puedes engañar a Mamá pero no a mi.—soltó—.¿Que ha sucedido para que no estés asistiendo al instituto?.

—Ya lo he dicho.—Jungkook soltó, a la defensiva—.No me siento bien.

Junghyun frunció el ceño—.Estoy hablando en serio, Jungkook.

El menor suspiró, cerrando el libro y dejándolo a un lado—.¿Que demonios quieres que te diga?.

—Eh.—Junghyun elevó la voz—.Que no se te olvide que soy tu hermano mayor.—advirtió—.¿Por que no estás yendo a clases?.

Jungkook suspiró—.No me siento bien, Hyung.—no estaba mintiendo, al menos no del todo.

Junghyun lo miró por unos instantes en silencio, inquietando al menor ligeramente—.¿Te han expulsado?.

—¡No!.—Jungkook gritó, alarmado por los pensamientos de su hermano mayor—.Claro que no.

Conquistando a Hyung. |Jikook| ✅Donde viven las historias. Descúbrelo ahora