LA FRATERNIDAD.

Capítulo 13.

Pov Windie.

- ¿Vais a ir al partido? - nos pregunta Dikra desde el baño, mientras que ella se está lisando el pelo nosotras (Yi han, Arianna, Ada, Alexa, Eva y María) estamos viendo una película de comedia que por cierto, yo ya he visto.

- ¿Qué partido? - pregunta extrañada Yi han a mi lado en el sofá.

- El partido de fútbol - nos contesta obvia mirándonos como si estuviésemos tontas o algo parecido. Ninguna contestó a lo que ella al final nos respondió.

- La temporada empieza hoy - nos dice mirándonos - ¿No os acordáis?

- No... Espera un momento... Aaaahhh... Sí, ya me acuerdo - le digo recordando como los chicos se iban cada dos por tres de la casa, pero si os soy totalmente sincera no sabía cuál era la razón por la que lo hacían y ahora esto ya me a quedado más claro.

- Aaaah sí, yo también me acuerdo - dice Arianna dándonos la razón a las dos.

- Bueno, ¿Vais a ir o no? - nos vuelve a preguntar Dikra dejando de alisarse el pelo para empezar a maquillarse mientras mantiene la puerta abierta para que podamos escucharla bien.

- Claro, no nos lo perderiamos por nada del mundo - le reponde a Dikra Ada - ¿Qué? Es nuestra tradición - se justifica ya que la estábamos mirando todas en el sofá y en el suelo espectantes.

- Tiene razón, iremos - le digo a las chicas que me miran haciendo un puchero.

- ¿Por qué me miráis así? - les pregunto a las chicas extrañada por sus pucheros y actitud de niñas pequeñas a las que le han negado un capricho.

- Es que queríamos hacer tarde de cine - contesta Eva aún con el puchero  puesto en su bonita cara.

- Pues hoy no va a poder ser, lo siento mucho, pero tenemos que ver un partido y animar a nuestra universidad cueste, lo que cueste - le respondo ayudandolas (mejor dicho arrastrandolas) del sofá y empujandolas a sus habitaciones para que se cambiasen de ropa porque estaban en pijama de cuerpo entero: unicornio (Eva), fresa (María), perro (Arianna), conejo (Ada), panda (Yi han), nutria (Alexa) y por último, lobo (yo).
Escuche como se cambiaban entre quejas y quejas, hasta que por fin estubimos todas listas. Yo me puse unos vaqueros negros con una camisa azul oscura y unas deportivas y por si acaso una sudadera (últimamente hace bastante frío, y los partidos son por la noche), Yi han se puso unos vaqueros rosa con una camisa también rosa, Eva llevaba puestas unas mallas moradas y una camisa blanca, Ada tenía puesta una camisa con estanpado de flores y un pantalón corto con estanpado de estrellas doradas, María llevaba una camisa naranja y unas mallas negras, Alexa una falda larga de color amarillo y una camisa de color negra, Arianna llevaba unos vaqueros rojos y una camisa blanca con rayas verticales de color negro y Dikra tenia puesto una falda corta de color negra y una camisa se color verde claro. Cuando estuvimos todas listas con todo lo que creiamos necesario que tendríamos que llevar, nos fuimos directas al campo de fútbol de la universidad donde las gradas se iban llenando poco a poco. Nos sentamos en unas butacas, donde el campo y los jugadores se veían de maravilla, de repente empezó a sonar música y los jugadores salieron al campo.

Pov Adam.

Empezó a sonar la música y nuestros contrincantes salieron a la pista de juego entre abucheos de la grada. Cuando nos tocó a nosotros salir lo hicimos entre aplausos y vítores del público, conmigo dirigiendo a mis compañeros de equipo ya que yo era el capitán (hoy sería mi primer partido en este puesto porque me cogieron al terminar de hacer las pruebas, y aunque no lo quiera admitir, estoy acojonado a más no poder).

- Acercaos - les digo a mis compañeros, hacemos un corro como en todos los partidos y yo empiezo a hablar.

- Chicos... Hoy hay que darlo todo ¿entendido? Hoy es el primer partido de la temporada y creo que no queréis dejar mal a nuestra universidad ¿verdad que no? - les pregunto mirandoles seriamente uno a uno y hablándoles con voz dura y fría.

- Así que... ¿¡Vamos a salir a darlo todo en ese campo y vamos a demostrar que esta temporada lleva el nombre de nuestra universidad en el trofeo?! - les pregunto gritándoles.

- Sí.

- No os oigo.

- ¡Sí! - gritan.

- ¿Que habeis dicho?

- ¡¡¡Sí!!!

- Así me gusta y ahora vamos al campo nenazas - les digo mientras que me dirijo al medio campo para donde se encuentran el árbitro y el capitán del equipo contrario. Empieza el juego, me digo a mí mismo.

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