Encantadoramente diferente.

Capítulo 28.

El entrenador está parado frente a nosotros exigiendo una explicación. Yo no puedo sentirme más avergonzada, nunca en mi vida me llamaron la atención por nada, pero desde que Zayn llegó, no hago más que meterme en problemas. 

—Dejaré esto pasar porque Gray tiene una conducta intachable. 

Dice, serio. Susurro un gracias para mi mísma. 

—Vuelvan a la cabaña. 

Dice, algo molesto. Zayn y yo nos apresuramos por desaparecer de allí. Luego de caminar unas pasos juntos, en un agradable silencio, Zayn se acerca a despedirse de mi para ir a su habitación. 

—Iré a ducharme, ¿nos vemos en el almuerzo?

Me pregunta, su mano tomando la mía. Sus ojos observándome detenidamente. Tengo que recordar que mi cabello es un desastre, ya que está todo mojado, lo que más quiero es salir corriendo de aquí. Zayn se las ha arreglado para lucir increíblemente tentador con el cabello mojado, él rompe todas las reglas. Yo aquí sintiéndome desastrosa y él allí luciendo más de lo alguna vez soñé.

—Hmmm. 

Murmuro, tímida. Aún no me acostumbro a todo de esto de tenerlo cerca todo el tiempo.

Rápidamente se acerca a mí y con sus manos sobre mis mejillas deja un dulce beso en mis labios. Me quedo momentaneamente paralizada con su repentina muestra de cariño y cuando sus labios se separan de los míos, las ganas de que me vuelva a besar aparecen. 

Abro mis ojos para ver como me observa con ternura en sus ojos.

Oh, él será el motivo de mi muerte.

—¿Te sientes mejor?

Me pregunta, acariciando mi rostro. 

Lo miro confundida, no sé de que está hablando.

—De ayer bebé, la fiebre que tenías, ¿estás mejor?

Me dice, cariñoso.

Me he peridido en el medio de sus palabras, he quedado estancada con la forma en que me llamó. Bebé. Me llamo bebé por segunda vez. Estoy sonriendo como tonta, sin entender lo que ha dicho, lo único que puedo saber es que mi corazón está bombeando felicidad a cada parte de mí. 

—¿Tomo esa sonrisa como un sí?

Dice, riendo. 

—Nunca estuve mejor.

Le digo, tranquilamente. La sonrisa de Zayn se ensancha, dejando que un suspiro se escape de mis labios. No importa cuantas sonrisas conozca, la de él siempre será mi favorita.

—Somos dos, entonces. 

¡Dios mío!

—¡¿Te llevó a pasear en un bote?!

Exclama la pelirroja. Jazmine está sentada frente a mí, las dos estamos sentadas sobre su cama. Mi pelo está mojado aún, pero de la caliente agua de la ducha. 

—Sí.

Le digo, asintiendo, ligeramente feliz.

—Eso es lindo.

Dice, sonriente.

—Lo sé.

Comento, encantada. 

—Te ves tan feliz, Aurora.

Comenta, mirándome con ternura. Me sonrojo ante su comentario, creo que es imposible decir que no lo estoy. Es increíble como una sola persona puede traer tanta felicidad a la vida de otra. 

—Zayn nos salió mejor de lo que pensábamos.

Agrega, irónica. Suelto una risa al escucharla, aún recuerdo como ninguna de las dos lo soportaba y ahora, Jazmine está comenzando a aceptarlo y yo estoy comenzando a... ¡Ni siquiera lo pienses! ¡Es muy temprano para sentir eso! Mi subconciente me está gritando, está en modo de alerta. Mi corazón está asintiendo hacia mí, cada uno de sus latidos aceptando en el gran problema que nos metimos. 

Nota de Aurora: Capítulo mega ultra corto, porque lo quería así, el próximo será muy largo y bastante sorpresivo así que.... ¡PREPARENSE!