Capítulo 32.

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Habían pasado 2 horas desde que había regresado a mi casa. El viaje con mi papá había sido muy divertido, se burló de mí todo el tiempo, especialmente cuando Zayn me llamó, segundos después que me había visto partir. Adorable.

 

Estábamos dando la vuelta al bosque, llegando a la carretera cuando The Way de Ariana Grande comenzó a sonar, ese es el tono de Zayn en mi teléfono. Él me estaba llamando. 

—¿Zayn? 

Digo, algo avergonzada.

—¿Está mal que ya te extrañé?Su voz suena muy dulce y podría jurar que tiene una mueca de culpabilidad en su rostro. 

No, yo tambien te extraño.

—No.

Digo, con una risita nerviosa. Mi papá burlándose de mí en silencio, haciendo expresiones bobas con su rostro.

—¿Tú también me extrañas?

La esperanza en su voz enternece cada parte de mi corazón. ¿Por qué él es así conmigo? ¡No lo merezco!

—Un poco.

Murmuro, roja de la verguenza.

—¿Un poco muchísimo?

Me pregunta y escucho su sonrisa. Me río ante la creatividad de sus palabras. Tonto.

—Sí.

Murmuro, mi voz casi inaudible, sin embargo con una gran sonrisa de rostro. Después de mi pequeña contestación los dos nos quedamos en silencio y seré la idiota más grande de este mundo, pero, quiero volver con él. ¿Me culparan por querer estar frente a sonrisa?

—Tengo que irme cariño, el entrenador Harrison está sobre mí. Llámame cuando llegues.

Murmura apresuradamente. Mi corazón se detiene cuando lo escucho decirme "cariño", aún no logro acostumbrarme. 

—Hmmm, te llamaré.

Le digo de forma dulce. 

—Adiós Aurora. 

Se despide y yo sonrío como una tonta.

—Adiós Zayn.

Me siento algo vacía sin él. Hemos avanzado tanto en pocos días y ahora no sé que hacer, además mi mejor amiga también se ha quedado y ninguno de los dos volverá en menos de dos días, así que estoy bastante aburrida. 

La tarde fue aún más aburrida y me encargué de terminar mi tarea de matemáticas y las de Jazmine, ya que, Duke vino a visitarme. Él se había enterado de mi accidente y quiso saber como estaba. Noté que su actitud conmigo había cambiado muchísimo, lo que de alguna forma me hizo sentir tranquila, tengo un novio celoso que cuidar. 

Al caer la tarde acompañamos a Sam a un partido de tenis. Los guapos, altos y fuertes compañeros universitarios de mi hermano me firmaron el yeso en mi tobillo y me sentí muy avergonzada. Los conozco desde hace más de un año pero mi timidez no quiere dejarme ir. 

A la noche, antes de irme a dormir bajé con dificultad a tomar algo de chocolate caliente que mi papá preparó más temprano, vistiendo nada más que una playera larga de color negro y mi querido yeso. Cuando llego a la cocina Whiskers está acostado en su cama, siendo el rey que sólo él puede ser. 

Me sirvo el chocolate en una taza de color blanco y subo con dificultad las escaleras. Antes de acostarme tomo los analgésicos que Jace me recetó. Cuando estoy cómoda en el silencio de mi habitación, escribiendo en mi diario y tomando mi taza de chocolate caliente, mi celular suena. 

Encantadoramente diferente.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora