Encantadoramente diferente.

Capítulo 45.

—Justo a ti te quería ver. 

Oh, mierda.

Sus ojos no son asesinos, son más que eso. Está sentada sobre mi cama de piernas cruzadas, vistiendo un pijama de Sam. Está enojada. Quiero correr a la cama con el idiota de Malik otra vez. Tengo miedo de lo que se viene sobre mí.

—Yo...Jazmine...

Balbuceo, jugando con mis dedos en forma nerviosa. Mi respiración errática.

—¿Por qué no volviste a casa?

¡Se parece a mi papá hablándome así! 

—Jazmine, estoy cansada. ¿Podemos hablar más tarde? 

Le pido, pero ella no se inmuta. Quiere respuestas.

—¡Te quedaste a dormir con aquel bastardo! ¡Después de todo lo que te hizo!

Me regaña y yo me averguenzo. Ella cree que sólo dormí con él. ¡Upss!

Camino hasta quedar frente a ella, luciendo arrepentida pero mi actuación se rompe cuando al momento en que me voy a sentar sobre mi cama, un gemido de dolor sale de mis labios. Mierda.

—¿Sucede algo contigo?

Me pregunta, su cabeza inclinándose para observarme. Sus ojos picando con la curiosidad y la preocupación.

—No Jaz, estoy bien. 

Le digo, aún dolorida. Ella me observa por unos segundos, estudiando mis expresiones y luego de un momento jadea en sorpresa. Estoy realmente jodida. 

—¡¿T-tú no has hecho l-lo que pienso v-verdad?!

Murmura, su dedo índice temblando cuando apunta hacia mí con él. La miro atónita y ella da un grito. El drama nunca fue lo de Jazmine, murmura sarcásticamente mi subconciente.

—¡Lo hiciste!

Grita y yo corro a cubrir su boca con mis manos. Ella patalea y yo la miro nerviosa. 

—Lo siento Jazmine. 

Susurro, sumamente avergonzada. Ella quita mis manos de sus labios y me mira atónita. Jazmine más que nadie sabe lo vergonzosa, insegura y tímida que soy. Tener ese tipo de intimidad con alguien es ir más allá  de mis límites. Felicitaciones Zayn Malik.

—¿Cómo sucedió?

Jazmine está boquiabierta, aún sigue enojada pero está sumamente asombrada, lo que causa un enrojecimiento permanente en mis mejillas. 

—¿Él no te obligó verdad?

Se certifica, tomando mi mano, toda compasión y preocupación. Una parte de mí se enoja con ella por pensar algo así de Zayn.

Casi le rogué Jazmine.

—No, él nunca haría eso. 

Le aseguro, mirándola a los ojos. Jazmine se relaja visiblemente. 

—Estaba tan preocupada por ti. Él estaba tan fuera de sí ayer antes de que tú llegaras, pero estoy tan sorprendida ante la forma que lidiaste con él. 

Me felicita, sus ojos algo pícaros. 

—¿Lidiar?

Pregunto, confundida.

—Lo manejas Aurora, nunca vi a Zayn de esa forma. Fue verte y ya era otra persona. ¡Tú no viste lo que hizo!

Me comenta, sus ojos abriéndose en forma dramática. No puedo evitar avergonzarme y una risita se escapa de mis labios, ¿Yo manejo a Zayn? ¿No será lo opuesto?