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                                                Más de 3,500 personas desaparecidas al año.

Le produjo una extraña sensación despertarse en completo silencio. En solo una fracción de segundo. Helen pasó de un profundo sueño a estar completamente despierta; luego se quedó un rato quieta escuchando. Hacía frío en el dormitorio. Giró la cabeza y miró el reloj que había dejado en un taburete al lado de la cama. Eran las seis y ocho minutos de la mañana; nunca había sido muy madrugadora y normalmente le costaba despertase sin, por lo menos, dos despertadores. Ahora lo había hecho sin ninguna ayuda y, además, se sentía descansada.

Puso a hervir agua para preparar el café antes de meterse bajo la ducha, donde de repente experimentó la placentera sensación de recordar el besó que se había dado con Sarah.

Al menor roce con el grifo de la ducho el agua pasó de arder a estar helada. Ya en la cocina, se sirvió la taza humeante con un poco de leche. Leyó el mensaje de Julia. Parecía que sería un fin de semana largo. Era sábado.

Intentó llamar a Julia, pero no consiguió escuchar más que la voz del contestador. Al pareces, estaba muy ocupada con su trabajo. Podía haberla llamado a la oficina o a su casa que estaba alquilando, pero, por pura pereza decidió no hacerlo; ya le había dejado un mensaje. En su lugar, se preparó un huevo con tostada y se sentó en la mesa de sala. Abrió la carpeta sobre la mesa.

Se puso a leer con suma concentración para que no se le escapara ningún detalle. Al cerrar la carpeta, ya bien entrada la noche, había llenado con apuntes varias páginas de su cuaderno, tanto con palabras clave que resumían el contenido como con preguntas a las que esperaba dar respuesta en las próximas carpetas. El material estaba dispuesto cronológicamente; no sabía a ciencia cierta se lo había organizado Fabio o si se trataba del sistema adoptado por la policía.

La primera hoja era la fotocopia de un formulario, del servicio telefónico de urgencia de la policía. El agente que se puso al teléfono firmó como O. M. V., lo cual Helen interpretó como oficial de guardia. En calidad de denunciante figuraba Joselyn Sánchez, cuya dirección y número de celular habían sido apuntados. El informe estaba fechado el viernes 15 de mayo de 2015 a las 18. 13 de la noche.

«Llamada Sra. Joselyn Leticia Sánchez Cabrera, inf. Sobre la desaparecida: Alejandra Verónica Nerio, nacida 6 de octubre de 1994 (20 años), desapareció en la orden de malta, viernes por la mañana. Denunciante expresa gran preocupación».

A las 7 en punto del día siguiente determinaba que un coche patrulla se le ordenó acudir al lugar.

A las 7.50 otra persona, cuya letra resultaba más difícil de interpretar que la O.M.V, había escrito que «No se encontró nada fuera de lugar». En el margen del informe.

A las 8.18 de nuevo O. M. V. «Inf. Inicial, que Alejandra Nerio de 20 años ausente desde el viernes por la noche. Fam. Incomunicada. Amiga de la desaparecida expresa gran preocup. No ha pasado el día en casa. No pudo haber abandonado su vivienda, docu. Encontrada en la habitación. Ning. Interior de la vivienda sabe dónde encontrar AN».

8.30 «O. M. V. inf. Por el rad. Sobre asunto».

El último apunte había sido registrado a las 12.20 «Llegada de C. M; en cargado del caso»

EstigmaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora