Estabamos llegando del aeropuerto luego de horas de vuelo, Sandra se encontraba durmiendo en el hombro de Aidan, mientras la mano que tenia libre sostenia las mias. Hace un frio de espanto y estoy que me congelo. De vez en cuanto Aidan me sonreia tiernamente, mientras yo solo lo observaba.
- ¿Tio ya llegamos? - Pregunto aquella criatura que acababa de levantarse de un profundo sueño.
- ¡Asi es!
- ¡Hace mucho frio! - Se quejo aquella niña.
- ¡Ten ponle esto! - Le extendi uno de mis abrigos para que Aidan la arrope con el.
- No pasa nada Sandra ya vienen por nosotros. - Enseguida vimos un letrero que decia Dinner. Un hombre bien vestido como chofer extendio la mano de bienvenida a Aidan y a mi me beso la mano.
- Bueno espero que arranquemos ya, hay señales de una tormenta de nieve.
- ¡Tio, no puedo respirar bien! - Se quejo Sandra que estaba arropada de pies acabeza de aquel gran abrigo, me apresuro y le destapo la carita.
- ¿Ahora si nena?. - Mire la carita palida de Sandra.
- ¡Gracias tia! - Se also para regalarme un beso en las mejillas.
- ¡Chicas, vamos no me gusta mucho este aire! - Se quejo Aidan.
...
Entramos a una lujosa casa, con candelabros de oro y jarrones de plata. Joss y Nathanael los confidentes de Aidan, dejaron las maletas en nuestras Habitaciones cuando una voz muy conocida salio de una de las habitaciones.
- ¡Sandra!
- ¡Mama! - Cargo aquella niña como uno de ss mejores tesoros.
- ¡Te extrañe plaga!- La lleno de besos. -¿Como te fue con tus tios?
- ¡Fue increible!, tia me llevo al parque, luego de que salid e la escuela y comimos mucho helado. - Nos miro muy sospechosa.
- No es para tanto, solo fueron 3 vasos. - Dijo Aidan con una pequeña sonrisa.
- ¿Tres basos? - Nos miro sorprendida.
- ¡Asi es mama, tres! - Señalo la niña poniendo sus dedos.
- ¡Tus tios te concienten mucho! - Nos miro acusados. - ¡Espero que despues de esos vasos no pudieran dormir. - Dijo ella muy macabra y risueña. Aidan se acerco y le beso ambas mejillas y la abrazo.
- ¡Gracias Aidan por todo!
- No hay nada que no haria por ti.
- ¡Preciosa, sexy como siempre! - Se acerco a mi y me beso las mejillas y me dio un fuerte abrazo mientras agarraba una de mis nalgas con sus manos.
- ¡Mama! - Se tapo los ojitos aquella niña. - Todos empezamos a reir.
- ¡Muchas felicidades April!, estoy contenta de que por fin este Tarado me haga tia!. - Aidan la miro para luego ponerlos en blanco. ella bajo hasta mi estomago y lo beso. Nopuedo negar que fue lo mas raro que me paso el dia de hoy. - ¡Un beso de mi bendicion !.
- ¡Gracias!.
- Deben estar cansados, yo me llevo a Sandra para que ambos descansen. - Aidan me tomo d ela cintura y me dirigia por las grandes escaleras de la casa. devo admitir que no hay mucha diferencia de los gustos de esta casa, como la de Aidan.
- ¿Estas cansada? - Me pregunta Aidan en un susurro.
- ¡Si! - No se dijo mas desde ese momento. Podia observar que de vez en cuanto Aidan sonreia de la nada. hasta que llegue a un punto que le pregunte que le pasa. Entramos a la habitacion que tenia un valcon a la vista del gran mar. Me sente en la cama y me quede lejos observando el mar. Siento como Aidan se agacha y me quita las botas de los pies con cuidado. Me quito el abrigo y encendio el calentador. Luego se sento del otro lado de la cama y se auito los zapatos y luego se quedo mirando tambien el mar de tras de mi cuando de repente chocamos mirada y este estaba sonriendo otra vez.
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Tú siempre y para siempre serás mía
Teen Fiction¿Que clase de amor es éste?, amor posesivo y egoista, ¡Oh no!, ésto no lo voy a permitir, no soy un objeto. Debi preguntarme hace tiempo, a que límite puede cambiar una persona solo por ti, no me refiero a un cambio bueno, un cambio de poder y poses...