pasa tan lento que no dejo de recordar la muerte de Zed ni las palabras que
decía antes de morir, y sus acusaciones. Me encuentro sentada en el Todo mueble observando como Aidan se vuelve un cubo de rubi en ponerse una camiseta, lo observo por un momento y este mira el suerte como si fuera algo extraño de ver. A actuado muy raro últimamente y eso me preocupa. Observo como deja el suerte en closet y elige una camiseta y se lo pone sin preocupación.- ¿Que tenía la camiseta? - Le pregunte muy curiosa sabiendo que esta raro.
- Era complicada de poner.
- Pues, igual que una camiseta. Me miro y bajo la mirada.
Estoy mirando hacia la ventana y Aidan se arrodilla y empieza a ser muecas el cual se veía algo gracioso, y besa mi vientre.
Me levanta y me tumba en la cama
- ¿Que hace digo algo extrañada?
-¡No te preocupes, solo me acostare contigo, tengo mucho sueño! - Lo mire por un largo momento en un aspecto serio.
- Descubriré que me escondes Aidan. - Me miro neutro, y su mirada respondía a mis acusaciones. Empezó a reír para luego terminar de tumbarse en la cama
- Bebe ¿Otra vez con eso? - Me abrazo
- Aidan sé qué te pasa algo.
- ¡No me pasa nada, solo es estrés del trabajo!
- ¡Estas más delgado!
- Estrés. - Dice algo calmado.
- ¡Si te mueres antes de que la bebe nazca te juro que te traeré del infierno. !
- ¡Trato hecho! - Dijo con una sonrisa divertida. No duro mucho para que callera en un profundo sueño, me quede mirando hacia el techo recordando cómo han cambiado las cosas con Aidan. Aun no me enamoro pero trato de hacerlo para que no sea tan complicado, me acerco a sus labios y los acaricio, deposito un pequeño beso en el para depositar tres más. Siento como se retuerce y fruñe el ceño.
- ¿Que pasa nena?
- Nada - Digo para quedar mirándolo mientras duermo
- Duerme amor. Lo quede observando y acariciando su barba.
- Quiero que me prometas algo. - Digo en un susurro y este solo gruñe - Ya que serás papa, cuídate lo más posible, no quiero que mi hija tenga la misma suerte que yo. Poco a poco Aidan abre los ojos. Hubo un momento de silencio.
- Lo hare bebe. - Beso mis labios y acosté mi cabeza en su pecho, no tarde mucho en dormir.
...
Siento como mi cuerpo tiembla y abro los ojos. El cuerpo de Aidan tiembla
- ¡Aidan!- Digo algo preocupada. Tomo su mentó y siento su cuerpo arder, ¡Tiene fiebre!, y lo raro es que el aire esta en 17 y ambos estamos arropados. - ¡Aidan despierta! - Digo preocupada y con un tono de ternura para que no se asuste. Le costaba abrir los ojos.
- ¿Qué?
- ¿Te sientes mal verdad?
- Un poco. - Afirma despreocupado. Me levanto de la cama y voy directamente al baño y lleno un tarro de agua fría, me dirijo a una de las gavetas y cojo una toalla caliente. Me acerco a él y pongo la toalla en su frente y una en su abdomen para bajarle la temperatura. Me dirijo al botiquín y cojo acetaminofén para que le baje la fiebre, quiera o no lo llevare al hospital hacerle unos análisis y me encargare de eso personalmente. Escucho como Aidan se queja y quita la toalla de su abdomen y se su frente.
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Tú siempre y para siempre serás mía
Teen Fiction¿Que clase de amor es éste?, amor posesivo y egoista, ¡Oh no!, ésto no lo voy a permitir, no soy un objeto. Debi preguntarme hace tiempo, a que límite puede cambiar una persona solo por ti, no me refiero a un cambio bueno, un cambio de poder y poses...