Cap. 53 ¨¡Ya lo se!

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Estaba parado ahí y solo me miraba. Su mirada era oscura, y dependiente empezó a gritar y a correr hacia mi, cuando intente correr, mis pies estaban clavados en el suelo, y al mirarlos estaban lleno de tierra. Cuando observe el cuerpo que corría hacia mi esta quemado. Se escuchaban gritos por todo el lugar, y cuando mire mis manos estaban llena de sangre. De repente estaba en otro escenario. Estaba pasando por el pasillo de la casa, se escuchaban llantos, subí a la habitación, y observaba a April llorar abrazando el cuerpo de su padre. Le toque los hombros pero cuando volteo su cuello estaba cortado, derramando sangre por todo el lugar. 

¡No! ¡April! . Intente salvarla, pero era muy tarde, había caído en mis brazos y no podía hacer nada mas, cerré sus ojos, y mis llantos eran fuertes. No podía vivir sin ella. ¿Como viviría sin el único amor de mi vida?, ¡Todo esto es mi culpa!

Abro los ojos de golpe y es cuando me doy cuenta que todo esto fue solo un sueño. Me encuentro en los brazos de April que me acaricia el pelo mientras recupero la respiración. 

-¡Esta bien, solo fue una pesadilla!, Calma. - Me decía con voz suave. Mi cuerpo ardía y mis sudores eran muy fuertes, un fuerte dolor en la espalda me dio que un quejido salio de mi, sentía que dejaba de respirar. 

- ¡April! - Dije en un fino hilo de voz. 

- ¡Aidan Dios mio! - De pronto siento oxigeno en mis pulmones, y mi respiración se tranquiliza,el dolor desapareció pero la fiebre y los sudores seguían.  - ¡Estarás bien!, ¡Te voy a cuidar! - Decía mi hermosa esposa abrazándome muy fuerte con sus ojos cristalizados.

...

April insistía en ayudarme a ducharme pero la quería comben ser que ya paso todo que solo era estrés, y una gran pesadilla. Ella lo encontraba estúpido, y pues es cierto. Me quite la camiseta y ella me miro con sus ojos agrandando.

- ¿Que pasa? - Dije algo calmado. 

- ¡Tu espalda!, ¡Esta... esta llena de salpullidos y ronchas. - Me mire al espejo y no puedo creer que es lo que estoy viendo, ahora si que no podre convencerla y no dejara de ser tan terca. 

- ¡Ah! - Dije calmado

- ¿Ah? ¿Por que eres así?, ¡Estas enfermo bebe! ¿Y así reaccionas? 

- ¡Bebe! - Me encanta escucharte llamarme así princesa. - Me acerco a ella y le acaricio el pelo, pero esta muy enojada. 

- ¡No me topes Aidan! ¡Si no te importas, como podre creer que me amas? - La mire fulminante de su comentario. 

- ¡Sabias, que prefiero morir antes de perderte a ti!. ¡No vuelvas a decir esas cosas por favor! 

- ¡Pues entonces no quiero de tu amor, hasta que me digas que es lo que te esta pasando! - Me apunto con su dedo y estaba muy enfadada.  Le sonreí y le agarre las manos para que no intentara alejarse de mi. 

- ¡Te quiero! 

- ¡No me digas eso!

- ¡Te quiero! - La abrazo y le acaricio el pelo, intenta alejarse de mi pero no la dejo. 

- ¡No es verdad! , si no, me dirías que te pasa. 

-¡Me tengo que bañar o llegare tarde princesa!

- ¡Ok! ¡Lárgate! ¡No me interesa! - Sale del baño y  tira de la puerta muy fuerte. Suspiro y reposo mi espalda en la pared. No me gusta mentirle me siento culpable, y eso es raro por que siento que en algún momento todo se me saldrá de las manos, y nunca me eh sentido desconfiado de mi mismo.  Si April se entera de todo lo que hice antes de cambiar, se olvidara de que existo, y todo lo que eh construido sobre el cadáver de su padre se ira al carajo. Y yo la amo tanto que no me gustaría sentir otra vez la emoción de que la tengo a la fuerzas. ¡La amo!, ¡La amo demasiado! y no me iré estando así con ella. Termino de ducharme y peinarme y todo lo que tenga que ver con ingiene y estética corporal y salgo a la habitación donde solo se encuentran mis maletas en el suelo. April se encargo de ayudarme de organizarla. Me visto en ropa informal,¨ ya que sera para esta tarde que me encontrare con mis socios¨. Son las 8:00 A m y si no me voy ahora perderé el vuelo. Bajo y veo a April intentando amamantar a Ally la cual solo lloraba y rechazaba el seno. Le toque los hombros y esta solo da un brinco. 

Tú siempre y para siempre serás míaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora