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-Penelope, me gustaria que pudieramos hablar. 

Al ver que trata de irse, le agarro de la mano pero de inmediato me aleja y da un paso atrás para mantener la distancia.

-¿Que desea, Señora? -pregunta con sequedad.

-Penelope, por favor, no seas injusta. -intenta darse vuelta pero me apuro a bloquear su camino -Jay quiso matarme, ¿esta bien? Él estaba furioso conmigo porque estoy de pareja con Jen.

-Si, claro, todos los hombres del mundo te desean, Fresa. -me responde rodando los ojos.

-¡No dije eso! 

¿Por que no me deja explicarle y usa mis palabras en mi contra? Le agarro de los hombros. Ella me aparta de un manotazo otra vez.

-No le gustaba porque para él estaba mal que estuviera con el asesino de su papá. ¿O me vas a decir que no te dabas cuenta que no era un asunto que hubiera superado?

-¡Lo que sé es que lo mataste, Fresa! -me empuja a un lado -¡Y que me lo ocultaste!

Mierda... 

-¡Y no sabes cuanto me arrepiento de no haberte buscando en el momento que paso todo y decirte lo que paso! -me vuelvo a poner en su camino -Penelope, eres mi amiga. -por favor, cree en mi. -Yo no sabia que su relación era de esa manera. ¡Tú eras la que siempre decia que no habia que enamorarse de los clientes! 

¿Por que no me cree? Misty esta tratando de sacarla del plan y abandonarla a su suerte. ¿Por que le cuesta tanto confiar en mi? ¡Hemos vivido miles de cosas juntas en estos dos años. 

-¿Acaso no significa nada nuesta amistad? -le susurro.

Asiente con la cabeza.

-Eso mismo te pregunto yo, Fresa. -dice ella en voz grave y con frialdad en los ojos -pero es obvio que no eres la misma chica que conoci hace dos años. Eres una niña mimada tal y como Suzanne te decia.

Trago saliva.

-Estas pasando mucho tiempo con Suzanne, ¿que ha pasado? ¿Desde cuando son tan amigas?

-Oh, no, no, cariño. No te atrevas a compararme contigo, yo no soy de las que corren para agradarle a la gente. A eso es a lo que te dedicas tú, Fresita. Por que desde mi punto de vista te has tirado a los pies del Jefe para tener su favoritismo.

Su mirada recelosa me empieza a hacer enojar. 

-Eres arrogante, egoista y no puedes hacer nada por nadie que no tenga nada para ofrecerte. 

-Cierra la boca.

-¿O que, señorita? ¿Me vas a matar a mi también por no hacer lo que dices?

Levanto la mano y le doy vuelta la cara de un cachetazo.

-¿Sabes qué? ¡Un día esa lengua larga que tienes te traera muchos problemas y yo, ni Misty estaremos ahi para ayudarte!

Aprieta los labios. Ni siquiera parece afectada por el golpe ni las palabras.

-Perdón, su alteza, por no saber ser una frigida estirada como tú. 

Resoplo.

-Al menos no soy dependiente emocional de los hombres. -respondo.

Giro en redondo y salgo caminando hacia los ascensores. ¿Como terminamos asi? Esto no salio como yo planeaba. Mierda. No se que hacer. Siento que estoy acorralada y que ya no tengo más opciones. Lo unico que espero es que cuando todo esto termine las tres estemos juntas.

Entro en el ascensor y pongo la clave para subir al piso de Jen. Debo empezar a tener la mente fria y dejar de ser tan impulsiva. Apenas salgo al pasillo escucho unos gritos y el sonido de algo rompiendose. ¿Que pasa ahora?

MENTIRAS CRUELES: Yo Soy Tuya Donde viven las historias. Descúbrelo ahora