Mi pequeña héroe (SUPERCORP)

"Siempre estare a tu lado"

—¿Entonces él vendrá hoy?

—Así es cariño, él puede pasar dos tardes a la semana contigo.

—Pe-pero yo n-no lo conozco.

—Y siento eso. —Alex estaba hincada a la altura de Kara. —es mi culpa, pero ahora podrás hacerlo.

—No es tu culpa, su-supongo que debiste tener un buen motivo. —contesto la pequeña jugando con sus manos. —pero, y sí, yo... Alex, no...

—Tranquila, respira cariño. —Alex se sentó al lado de Kara y la abrazo.

—¿Y sí, sí no le... agrado?

—¡Ey! —Alex trajo a Kara a su regazo y levanto su rostro. —tú eres una niña hermosa, claro que le agradaras. Él deberá estar orgulloso de tener a una niña tan inteligente y buena como tú. —Alex dejo un toque en la nariz de la pequeña, Kara sonrió y asintió. —bien, ahora ve a lavarte las manos que Sam y Lena estarán por llegar. —la pequeña dejo un beso en la mejilla de su hermana y corrió al baño.

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—Hola Kara. —saludo Lena en cuanto entro al departamento.

—Hola Le, hola Sam...i

—Hola peque. —Saludo Samantha sonriendo.—Hola, te traje esto. —Alex tomo la botella y sonrió.

—Gracias.

—¿A que hora vienen por ti K? —cuestiono Lena en cuanto vio que su hermana y Alex se iban a la cocina.

—No lo sé, Alex solo dijo que hoy lo vería.—contesto la pequeña encogiendo los hombros.

—Te traje algo. —Lena saco un pequeña cajita de su pantalon. —ya que yo no podre estar hoy contigo, quiero que tengas esto, si te sientes nerviosa juega con el como lo harías con mis manos. Eso te calmara.

—Se-seria como si tú estuvieras conmigo. ¿Cierto?

—Yo siempre estaré a tu lado. —Lena abrió la cajita y saco un pequeño Ángel tallado en madera.

—Un Ángel. —susurro Kara. —gracias Le, lo cuidare muy bien.

—No quiero que te sientas mal K, tú eres fuerte. —Kara sonrió, sintiéndose exactamente así, la niña más fuerte y afortunada del mundo.

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—Entiendo que estés preocupada, pero Kara es fuerte.

—Lo sé, soy yo la que esta aterrada. —Samantha presiono la mano de Alex, quería hacer más por su amiga, pero lo único que estaba en sus manos era estar ahí, a su lado.

—¿Donde esta mi pequeña? —exclamo el padre de Alex en cuanto esta le abrió la puerta.

—En su habitación, primero tengo que hablar contigo.

—Bien, tu dirás.

—Kara sufre de los nervios desde hace años, ella no lidia muy bien con situaciones fuertes.

—Entiendo, cuidare bien de ella.

—Lo harás, ella es todo lo que tengo, si solo te atreves a levantarle la voz yo...

—Tranquila mi amor. —interrumpió el hombre sonriendo. —ella se la pasara bien con su padre.

—Otra cosa. —el hombre la observo desesperado, Alex conocía muy bien a su padre, sabia que la paciencia no era uno de sus fuertes. —ella no sabe nada. No tiene idea del monstruo que eres, se gentil con ella.

—¿Puedo verla ahora?

—Voy por ella. —Alex asintió sin dejar de ver a su padre. Samantha no tardo mucho en aparecer, las dos pequeñas venían con ella, una en cada mano.

—Princesa, estas enorme. —exclamo el hombre acercándose a Kara, a Samantha le extraño un poco la situación. La pequeña sujeto con fuerza a Samantha e intento esconderse detrás de ella. —yo soy tu papi. —dijo el hombre al ver la reacción de la niña. Lena soltó la mano de su hermana y se acerco a Kara la rodeo con su pequeño brazo y le susurro. ¨el ángel¨ Kara asintió y lo saco de su chaqueta.

—Al. -susurro Kara un tanto nerviosa. La chica se acerco a su hermana y se inclino hasta quedar a su altura.

—Esta bien cariño, él es tu papá. —el hombre rodó los ojos al escuchar a su hija mayor.—puedes ir con él, cuidara de ti. —esto ultimo lo dijo viendo de reojo al hombre.

—¿Tú estarás bien? —Alex sonrió y abrazo a su hermana, tenia que ser fuerte frente a ella.

—Lo estaré, te veo pronto. —Kara dejo un beso en la mejilla de su hermana, se giro buscando a Lena e hizo lo mismo.

—Debe cuidar de ella. —dijo Lena dirigiéndose al hombre, aunque le sorprendió el tono de la niña, sonrió y asintió.

—Lo haré. —El hombre le tendió la mano, la pequeña con tiento la tomo. —nos divertiremos mucho.

Al cerrarse la puerta Alex no lo soporto más camino a la cocina con los ojos llenos de lagrimas. El rostro de su hermana al ver a su padre por primera vez era el mismo que ella ponía cuando lo veía llegar borracho. Samantha le pidió a Lena que aguardara un poco en el sofá. La pequeña sin mucho entusiasmo asintió.

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Nota: Pues dos nuevos capítulos, espero los disfruten tanto como yo lo hago al escribirlos, cualquier observación, no duden en dejarla en los comentarios. Gracias por leer 😘 y a quienes me han comentado que les encanta, gracias al doble, son las responsables de que la historia siga ☺️🥰 como dato, las ocurrencias de Lena, son las que más disfruto escribiendo, así como su instinto de protección hacia Kara.