TALENTOS ZODIACALES [TSZ] [#2 BSZ]

Capítulo 38- Corazones confundidos

Maratón 2/3

"El amor va a florecer, estoy segura"

Los chicos ya estaban en el autobús de vuelta al complejo. La verdad es que la tarde había llegado tan rápido que ni siquiera les dió tiempo a tomar un cafecito.

Por suerte, ayer, luego de una exhaustiva busqueda por parte del director y de varios profesores, los encontraron a los pobres signos como a la media noche. Todos estaban durmiendo con una fogata apagada y con sus abrigos cubriendolos, algunos abrazados mientras que otros alejados del uno y del otro.

Gracias a Dios no sufrieron ningún rasguño, salvo Sagitario y Escorpio por su búsqueda de señal, pero nada grave como para no sanarlos en la enfermería del campamento.

Así que iban en un bus mucho más pequeño debido a que los de quinto aún tenían dos semanas por delante en ese terreno maligno como los signos lo llamaban, por todo lo que les pasaba allí. Al final este retiro no sirvió para nada ya que volvían con muchos más nervios y con mucha más tensión de la que tenían cuando se fueron.

Pero las que estaban más que confundidas y nerviosas eran las chicas, su corazón y mente eran un lío, era como un tornado que al parece nunca desaparecía... un tornado que las hacía cuestionar de absolutamente todo, de hasta lo que sentían.

Les gustaban sus novios, les gustaba absolutamente todo de ellos pero... el tema era si habían confundido ese cariño de pareja como uno de amigos, no sabían con exactitud y eso las preocupaba... aunque tal vez sólo era tema de pasar más tiempo con ellos y sentirían algo mucho más fuerte... ¿no?...

Tal vez sólo era eso... acostumbrarse, después de todo, no tuvieron relaciones serias durante 5 años y como ya dije, era tema de acostumbrarse y dejar que la semilla del amor creciera aún más.

Pero había cierta plaga que no dejaba que creciera aquella plantita, y si, hablo de esos chicos que ya habían perdido toda la esperanza y ya estaban admitiendo sus sentimientos hacia las chicas a duras penas. Después de todo no perdían absolutamente nada con admitirlo, solamente eran demasiado tercos y se comportaban como niñitos de kínder.

Piscis se levantó de su asiento y salió hacia el baño debido a que su madre la llamaba y quería tener un poco más de privacidad, abrió la puerta y entró con rapidez, cerró la puerta y trató de mantenerse en pie debido a que el colectivo hacía movimientos muy bruscos que hacían caer a cualquiera.

Contestó antes de que le cortara mientras se apoyaba en la pared y se tambaleaba un poco, como odiaba cuando su madre la llamaba en los momentos más inoportunos.

-Hola mamá

-Hola mi vida, ¿Donde andas? —escuchó a través de su teléfono, aunque odiara estos llamados sorpresa que le hacía su madre, le hacía bien escucharla.

-Pues nos fuimos al bosque Findderhide, fue algo así como un retiro, aunque lo menos que hicimos fue despreocuparnos —rio algo amarga al recordar como pasó nervios en ese bosque.

-¿Cómo? ¿Qué fue lo que les ocurrió? —se notaba la preocupación de su progenitora haciendo que Piscis sonriera.

-Bueno, fuimos al bosque y nos perdimos, se supone que tendríamos que haber caminado hacia la cascada pero terminamos en medio de la nada, recién a la media noche nos encontraron —podia notar la cara de preocupación de su madre, si, aunque estuvieran en una llamada común.

-¡¿No te ocurrió nada?! ¡¿Se hicieron daño con las chicas?! —ella tomaba a las demás como hijas debido a que se conocían hace años y le caían muy bien.