Dulce Lado Oscuro.

Te entiendo.

Después de servir los platos con la comida sobre la mesa, seguido de los vasos con refresco, finalmente pude sentarme en una de las sillas. La mesa tiene forma rectangular, a mi lado izquierdo se sentó Tristan y al derecho Milton. Ariana y Carter se sentaron frente a mi, pude notar lo incómoda que estaba Ariana. Mamá se sentó en una de las esquinas y Mathew en la otra... Parecía una cena o reunión"familiar". No me agrada mucho que mamá salga con otro hombre. Mathew parece simpático y agradable, pero no quiero un futuro padrastro y menos un hermanastro que está para comérse...

-Hey ¿No piensas comer? -me susurró Tristan, trataba de hablar bajo mientras la nueva pareja nos contaba cómo fue que se conocieron, ¡Iugh!- Llevas un buen rato mirando tu comida -dijo inexpresivo.

-Estaba algo distraída -alcé la vista y miré a Carter, Tristan siguió mi vista, miró a Carter, frunció el ceño y luego continuó comiendo.

-Bueno y eso es todo -dijo finalizando su historia la cual no escuché- Chicos -me miró- En serio amo a Mathew y perdóneme si no les conté nada, no sabía como reaccionarían -entonces cuando este saliendo con algún chico, tambien se lo ocultaré, porque no sabré como reaccionarán.

-Me gustaría ser aceptado junto con mi hijo en esta familia -Carter viró los ojos.

-Samantha, Milton -miré por milésima vez al chico de ojos miel y piel cobriza- Mathew se quedará con nosotros al igual que Carter -casi escupo la comida, Tristan me dio unos leves golpes en la espalda, traté de respirar y me tranquilicé- ¿Sam? Me parece o no quieres que Mathew y Carter se queden... -dijo seria.

Recibí un mensaje al celular, mamá me seguía mirando, creo que esperaba una respuesta, pero preferí revisar el mensaje: "Son unos mantenidos" -Tristan H., reí muy fuerte, ni si quiera me percaté del momento en el que lo escribió- Lo siento -reí de nuevo- Ya, okey, lo siento -me acomodé en mi asiento.

-Y bien... ¿Algún problema con que Mathew y Carter se queden?

-No -dije mirando mis uñas.

La cena transcurrió algo incómoda desde entonces. Mamá insistió en que Tristan se quedara unos minutos, él aceptó y se sentó en uno de los muebles, yo me senté en el mueble de la derecha y Carter al frente. Ariana dijo que tenia sueño y subió a su habitación, se que fue a propósito, solo para dejarme con Tristan y Carter.

-Mathew, déjame mostrarte la casa -sonrió como una adolescente enamorada.

-Seguro, cariño -comenzó a subir las escaleras detrás de mamá. A mi no me engaña, le estaba mirando el trasero- Carter, ¿Vienes? -dijo amable. Milton pensó que lo llamaron o que se yo, pero corrió detrás de ellos.

Negó con la cabeza: -No, gracias -dijo concentrado en su móvil. Mathew se encogió de hombros y subió.

La verdad quisiera conocer mas a Carter, hablar un rato con él, pero sin Tristan cerca.

Tristan se levantó del sofá... A veces creo que las personas me leen la mente... Tristan se arregló su saco y dijo: -Ya me voy, Mary me espera. Adiós, Samantha. -me lanzó una mirada indescifrable. Abrió la puerta y salió.

-¿Es tu novio? -dijo sin la mas mínima vergüenza... Así que le respondí como si lo que preguntó no me hubiese importado.

-Somos, eramos amigos... Los mejores -susurré.

Rió: -Entonces ¿Por qué tu madre nos lo presentó como tu amigo? -se cruzó de brazos.

-Haces muchas preguntas.

-Sólo hice dos hasta ahora.. Bueno tres con esta, ¿Me cuentas? -me miro fijamente.

-No lo sé, a penas nos conocemos -sonreí al ver que hizo un puchero- Ay -viré los ojos- Está bien -me hizo una seña para que me sentara en el sofá junto a él. Me levanté y me senté junto a él.

-... Y eso es todo -escuché la voz de mamá y sus resonantes tacones bajar por las escaleras-  Hey, ¿Que hacen? -dijo mamá. Carter y yo volteamos a verlos ya que la escalera estaba justo detrás de nosotros.

-Déjalos, tratan de charlar un poco -nos miramos y luego asentimos como respuesta.

-Bueno, Milton ya esta dormido, no hagan mucho ruido.

-Nosotros estaremos arriba -mamá y Mathew se miraron mutuamente, de una manera pervertida y misteriosa, que asco.

Le conté todo a Carter, él en varias ocasiones se reía de lo que le contaba, pero no dejaba de ser amable conmigo. Sin embargo, ya me había dado cuenta de que con su padre, Carter, no era muy respetuoso. Lo noté por la forma en la que su padre tuvo que salir y hacerlo pasar cuando llegaron.

-Ese chico... -pensó unos segundos- Tristan, es un idiota -dijo como si nada.

-Tal vez -afirmé, ya no quería hablar mas de él, me ponía algo triste recordar todo- Y ¿Por qué no te llevas bien con tu padre? -me miro confundido.

-¿Por qué lo dices? Eso no es cierto -bufó.

-Si, es cierto, lo noté cuando llegaste y tu padre tuvo que hacerte entrar aquí a la fuerza prácticamente.

-¡Ja! -exclamó- Él no es mas fuerte que yo...

-Ese no es el punto -puse los ojos en blanco- Anda, cuéntame, ¿Pasa algo malo entre ustedes?

-Son cosas personales -suspiró- pero supongo que puedo contarte, casi somos familia -se encogió de hombros.

-Okey, cuéntame.

Se quedó unos segundos en silencio: -Yo... No quería venir aquí -dijo al fin- Porque no quiero formar parte de otra familia... Todo comenzó con una pelea que tuvieron mis padres hace varios meses, desde entonces las peleas se hicieron mas continuas hasta que mi madre se distancio de mi padre y él me obligó a vivir con el en un departamento en Los Ángeles... Allí fue cuando mi padre conoció a tu madre, al parecer se volvió a enamorar. No digo que tu mamá no sea buena pero, prefiero a la mía, quería quedarme con ella pero no pude. Discutí con papá sobre eso y no pienso tratarlo bien o ser amable con alguien como él.

-Wow, créeme, te entiendo, solo que yo acepté la decisión de mamá al separarse de mi padre -noté que Carter estaba triste y le froté el brazo tratando de que se tranquilizara o algo- Pero ¿Puedes visitarla? O ¿No?

Negó con la cabeza: -No me lo permite, además esta lejos, ella está en Bradford -se cubrió el rostro con sus manos. Le acaricié una de ellas con mi mano, él quitó las manos de su rostro y entrelazó sus dedos con los míos.

Lo mire seria, esto no me lo esperaba: -¿Qué haces?

-Perdón -trató de soltarme, pero lo sujeté nuevamente y le apreté la mano, si eso ayudaba a que se sintiera mejor, pues lo haría.

-Gracias -sonrió.