Joder, lo siento.

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-Tris... -no pude terminar de pronunciar su nombre.

Sentí su mano bajar por mi estómago hacia abajo. Al hacer eso, la camiseta que llevaba puesta se levantó exponiendo mi piel. Tristan acarició con sus dedos mi piel y tomó el borde del elástico del pantalón, haciendo que me moviera hacia atrás topándome con él. Un sonido sexy salió de su garganta y empujó sus caderas hacia adelante, pegándose más a mi y expandiendo sus dedos jodidamente lento por debajo de mi... Oh, no. No uso ropa interior, sus dedos se encontraban muy cerca.

Empezó a besar mi brazo izquierdo hasta llegar a mi cuello. No quería apartarlo, si esto era un sueño, pues no quería despertar.

Sus caderas se movían lento contra mi, haciendo que mi excitación creciera. Pronto, sus dedos frotaron la parte más sensible de mi, mis piernas se separaron de a poco para darle un mejor acceso. Parecía algo muy fácil de hacer para él, tenía el control. Sus dedos se movían un poco más rápido, un gemido se me escapó, haciendo que sus movimientos cesaran y que se levantara de la cama. Nunca había visto a alguien moverse tan rápido, en cambio yo, no me moví.

-¿Sam?

-¿Si? -intenté levantarme, hasta que quedé sentada sobre la cama.

-Joder, lo siento... -estaba asustado, se notaba en su tono de voz- Pensé que estaba soñando. ¡Maldición!

Me sentí tan decepcionada y avergonzada en ese momento. Todo lo que había pasado fue un sueño para él. En ningún momento él fue consiente de lo que hacia, de seguro soñaba con Camile, Lynn, o la pelirroja del club. Todo era posible, menos que de pronto sintiera deseos hacia mi. Él sólo a jugado conmigo desde que me conoció, todos esos bellos detalles fueron un juego, si hubiera sabido que el follaba con todo lo que camine y sea bonito desde un principio, pues no me hubiera enamorado de él. Así que, no creo que yo haya sido parte de su sueño hace unos minutos, sólo pensaba en otra chica, es lo más lógico que puedo pensar ahora.

-Sam, dime algo, por favor -dijo con un toque de desesperación.

Luego de unos segundos me animé a responderle: -No te preocupes, no pasa nada. Todo esta bien -cerré los ojos y al no oír respuesta de su parte los abrí, Tristan no estaba. Era de esperarse.

De las muchas veces que me comporte con una estúpida, esta era la que llevaba la delantera.

Llevé mi mano hacía mi frente, estaba caliente. Giré mi cabeza para ver hacia la ventana y sentí que una luz a parte de la luna iluminaba la habitación, mi celular.

"Ariana 💚

Sam, de seguro estas durmiendo, pero yo no, así que aprovecharé para decirte que... ¡Te quedarás con Tristan por cinco días! A tu madre se le antojó salir de viaje con todos nosotros, Zayn también vendrá!! Yeii 😍 bueno y logré convencer a tu madre para que te deje quedarte allá. No preguntes qué le dije, pero no sabe que estás con tu Tristan, jajaja. Nos vemos. Miami ❤️❤️".

Mis ojos se abrieron de par en par y no sabía si gritar o correr a casa para impedir que se fueran sin mi. Finalmente no hice ninguno de los dos. Tuve como diez intentos fallidos de envío de mensajes a Ariana ya que no tenía crédito en el móvil. Mi vida no podía ser peor.

Luego de pensar en alguna solución, me acordé que en mi blusa tenía unos ochenta dólares que quizás me servirían en algún no muy asqueroso hotel... O eso espero.

Un poco más calmada ante las circunstancias, me recosté en la cama y traté de dormir un poco. Mañana será mucho peor que ahora.

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A veces creo que la novela es horrible 😔. Necesito ánimos 💔

Dulce Lado Oscuro.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora