Dulce Lado Oscuro.

¿Jamás has besado a alguien?

Aun con ganas de seguir durmiendo, me levanté de la cama, me dirigí al baño para darme una ducha y luego volví a mi habitación.

Una vez lista, tomé mi celular, lo guardé en el bolsillo de mis shorts y baje hacia la cocina, toda la casa estaba muy silenciosa, de seguro era muy temprano, no me fijé en la hora y mi hambre era mas poderoso como para detenerme a mirar la hora en mi celular.

-Buenos dí... -me quedé parada en la entrada atónita y casi derramando baba con lo que estaba viendo - as -terminé la frase. Carter dejó su taza de café sobre la mesa.

-Buenos días -rió- Ya es tarde -y yo que pensé que era muy temprano - toma -me dio una nota, la cual se me resbaló de las manos, era demasiado tener a Carter sólo en boxers frente a mí... Pero no se compara con Tristan. Ay ¡Ya para de pensar en el, Samantha!

Sus músculos se tensaron cuando se agachó para recoger la nota y me la entregó nuevamente- ¿Estás bien? -rió y pasó una de sus manos por mi frente para comprobar que no tenga fiebre.

-Eh... Sí -dije un poco más calmada, ¿Que rayos me pasa?

Me senté en uno de los bancos que rodeaban la mesa y comencé a leer la nota:

"Sam, Carter; nos fuimos de paseo, lamentamos no poder ir con ustedes. Estaban dormidos y no queríamos despertarlos. Espero que comprendan, volvemos a las 11:00 pm. Los queremos.

Liz y Mathew."

-¡Oh! ¿En serio? -dejé el papel sobre la mesa- ¡Dijo que se van de paseo y volverán casi a medianoche, ¿Qué clase de paseo es ese?

Rió: -¿Te habían dicho que lees muy lento? -¿En serio? ¡Y eso a que viene con el tema!

-Ese no es el punto, Carter -lo mire seria.

-Okey, tranquila, es un paseo nada más -bebió lo que quedaba de café en su taza.

-Sí, ya se -me acomodé un mechón de cabello que caía sobre mi rostro- No puedo creer que Ariana se haya ido sin mí... Como sea -me levanté del banco y saqué el Yogurt de vainilla del refrigerador y la caja de cereales de la repisa. Carter se fue, creo que subió a su habitación.

Cuando terminé de comer, vi la hora, casi era medio día, imposible. Escuché que alguien bajaba por las escaleras, era Carter y esta vez si llevaba ropa puesta, bueno solo unos pantalones oscuros algo ajustados, unas zapatillas negras y una camiseta blanca en sus manos... Podría verlo sin camiseta todo el tiempo...

-Ya casi son las 12:00 pm, ¿Quieres algo de comer? -se acercó a mí- Puedo conducir a algún restaurante, ¿Vamos? -enrolló la camiseta que tenia en sus manos.

-Acabo de desayunar, asi que por ahora no tengo hambre, gracias de todos modos por preguntar -mordí el interior de mi mejilla.

Se encogió de hombros: -Bueno... Oye, ¿Dónde dejo la ropa para lavar?

-Allá -señalé la puerta de la izquierda, la lavandería.

-Gracias -entró y a los pocos segundos volvió sin la camiseta. Pensé que en algún momento se la pondría, pero me equivoqué -Y... ¿Qué quieres hacer? -bajó la cabeza y luego levantó la mirada, me vio y mordió su labio inferior.

-Emh... -se me a cercó - No lo sé -di unos pasos hacia atrás y me topé con la mesa, él me rodeó con sus brazos y apoyó sus manos en la mesa.

-¿Y si me ayudas con algo? -acercó sus labios a los míos. Me aparté, no pensé que el chico amable de ayer, pudiera cambiar y ser mas atrevido.

-No lo creo, no haré eso -dije firme.

Rió: -¿A qué te refieres con "eso"? -hizo las comillas. Me encogí de hombros, no le diría que es lo que pensaba, de seguro diría que soy una pervertida- Ugh, okey, lo arruiné, yo sólo quería... -se rascó la nuca.

-Dime -enarqué una ceja.

-Está bien, eh.. Yo, yo sólo quería saber como se besa -un momento, ¿El chico lindo nunca había besado a nadie? ¡No lo creo!- Pero creo que me excedí y lo arruiné -golpeó la mesa.

-¿Jamás has besado a alguien? -dije con miedo.

-No -dijo avergonzado.

-Entonces, querías usarme para poder besarme, ¡Ja! -dije con burla.

-No, no es eso... Rayos, es que yo soy algo tímido con las chicas y creo que contigo tengo más confianza... Ademas eres muy hermosa, no quería usarte, lo siento.

-Somos casi hermanos, no voy a besarte -dije arreglando un poco mis shorts, creo que se habían subido mucho.

-Bueno -sonrió pícaro- te robaré un beso, entonces -Esto no es posible, Carter es muy atractivo, no puedo creer que lo esté rechazando, tal vez sea por que no soy una perra que anda besando a todo el mundo o porque aun siento algo por Tristan.

-¡Ja! Ya lo veremos -alcé una ceja y salí de la cocina.

-¿A dónde vas? -lo ignoré mientras subía las escaleras hacia mi habitación.

Una vez adentro, cerré la puerta y me senté en mi cama...

-¿Qué puedo hacer? -dije en voz baja. Me dirigí a mi repisa con libros y tomé un libro, era uno de los antiguos que tenía allí: "Romeo y Julieta", antes de que me recostara en mi cama para leer, visualicé una pequeña bolsa plástica transparente con algo colorido dentro. Tomé la bolsa en mi manos y la abrí, eran globos de agua... -Umh... Tengo una idea. -sonreí.