♥ Llanto ácido y dulce ♥

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Pasaron 3 días, Ymir no se apareció por obvias razones, Krista empezaba a preocuparse, llamaba a su celular pero no respondía, tocaba la puerta de su casa pero nadie abría.

Su mirada comenzaba a entristecerse y no estaba actuando como siempre, ya casi no hablaba y se la pasaba sola, no le hacía mucho caso a Nifa.

»»»»

- Cuéntame entonces...después de lo que pasó en la cafetería ¿Eren te siguió? -  comenzó la plática al llegar al Instituto

- Sí, le dije que soy capaz de matar a cualquiera si no me controlo y pues no pude mentirle....y le confesé que estaba loca -  suspiró preocupada

- Pero no le mencionaste a Mina y a Hannah ¿Verdad? -  preguntó

Mikasa negó con la cabeza.

- Hasta ahora no debe saber...por el miedo le dije que se alejara de mi y que me...olvidara -  dijo cabizbaja

- De verdad que en serio a veces no te entiendo, ¿Por qué dijiste esa tontería? -  preguntó incrédula

- Le dije que por unos días, pero entiéndeme tú a mi, si no logro controlarme él es la última persona a la que quisiera hacerle daño, ni siquiera me atrevo pero en un arranque como ese...-  terminó de darse a entender

- ¿Y qué te dijo? -

- Que no lo haría y que se quedaría conmigo, incluso que hará lo posible para que esto..se...me..quite -  su rostro se sonrojó al recordar aquello.

Annie rodó los ojos en forma burlona junto a una sonrisa.

- Si tu estas enferma de la cabeza él está enfermo de amor por ti, agh que cursi -  terminó quejándose para después, ambas sonrieran.

- Bueno pues, lo importante es que ya lo tienes y el trabajo es seguir y que él no sepa hasta que llegue el momento -

- Así es, en lo mientras, solo sabe que estoy mal -  miró hacia el suelo.

Más tarde entraron a clases, todo iba normal, tranquilo incluso en silencio, el profesor se había dirigido fuera del aula por un momento, no dijo para que pero pronto vendría, todos estaban en su mundo cuando llega cierta chica alarmada, llamando la atención de todos.

- ¡Krista! -  la chica entró sin más y se quedó en medio del pasillo del aula.

La rubia se levantó.

- Ymir...la dieron como desaparecida, no la encuentran por ningún lado -  Nifa se quedó callada, esperando una reacción.

Krista se volvió a sentar y sus lágrimas comenzaron a brotar, sin cesar.

Pronto comenzaría a sollozar, algunos fueron a consolarla, creando un pequeño círculo al rededor de ella.

«Ahora te toca a ti sufrir...caprichosa»  pensó Mikasa mientras una discreta sonrisa aparecía en sus labios.

De inmediato Krista se levantó y se dirigió a la azabache y su amiga.

- Fueron ustedes ¿Verdad? -  preguntó indignada

- ¿De qué o qué? -   preguntó Annie

- ¡No se hagan! ¡Apuesto a que ustedes están involucradas en la desaparición de Ymir! -  gritó

- ¿A qué te lleva esa conclusión? -  preguntó la azabache

- No necesito recordar nada sino como eres en verdad, y estoy segura que tú la desapareciste -  frunció el ceño, rozando ligeramente su cuello con sus dedos, recordando lo que ella le había hecho.

Todos miraron a Mikasa y ella sonrió y se levantó.

- Pues ganas no me faltaron, pero créeme, yo no lo hice, no soy capaz -
La enfrentó cara a cara

- No es lo que tú expediente dice, sabes? -  declaró

- Eso, eso hubiera sido lo que me hubiera impulsado a desaparecerla, porque no sólo vieron mi información sino también la de todas las chicas que sospechabas se acercarían a Eren, y mira, solo lograste que nos juntaras más, lo más importante es que a ustedes no les tenía que importar nuestras vidas, no era de su incumbencia, pero claro, siempre se metieron donde no les importaba, tal vez eso envenenó tu mente -  reveló ante todos.

Ymir y Krista se encargaron de meterse en la oficina del director y buscar el expediente de todas las chicas, que por obvias razones el de Mikasa no era certero del todo. Todas las chicas miraron con sorpresa a la rubia, las cuales retrocedieron un paso.

- ¿Qué ganas con revelar eso? -  preguntó burlona pero aún con lágrimas

- Sería la misma cosa si yo te pregunto...¿Tú qué ganas con besar a Eren cada vez que se te pega la gana? -  preguntó un algo ya molesta

Krista se paralizó.  Todos la miraron con sorpresa.

- Aa, no dices nada, bueno, piénsalo y luego me contestas porque más aparte, tampoco es bueno jugar con el corazón roto de alguien, si tu dices que Franz era un asco para ti, ¿qué quiere decir esto? -  preguntó enseñando su celular, el cual tenía una foto en donde la rubia abrazaba y besaba al chico.

- Eres una chica mala...Krista -  habló Annie.

De inmediato salió del aula a llorar más.  El grupo comenzó a murmurar, Krista ya tenía otro punto de vista ante todos.

«Puedes hacerme sufrir e incluso llorar, pero yo siempre te sobrepasaré, tus lágrimas ahora son agua con azúcar para mi» pensó y sonrió más notablemente, tenía ya varias armas para torturar a la chica no° 1.

No podrás....escapar de mi 🔪😍Donde viven las historias. Descúbrelo ahora