Se que algo en mi está mal...lo sé.
Pero aquél día que te conocí sentí la necesidad de tenerte conmigo y solo conmigo.
Eren...Eren Jaeger...serás mío y de nadie más, no dejaré que nadie más se te acerque, me encargaré de eso.
Olvídate de tus amigos...
Llegaron al lugar, la arena recibió sus pies ahora descalzos, la pequeña lancha se marchó y ambos observaron el lugar...era grande y hermoso.
Cerca del mar había una casa, era linda, era el nuevo lugar donde iniciaría su nueva vida.
- Se ve acogedor -sonrió la azabache
Ambos se tomaron de las manos y se dirigieron hacia alláy abriendo la puerta se encontraron con...una..chica?
El rostro de Mikasa cambió repentinamente a una no muy favorable para esos momentos.
- Hola...amm, ustedes..¿Son los que llegaron a vivir aquí? -preguntó, se notaba que era tímida.
- Aamm, y tú...¿Vives aquí? - preguntó Eren algo confundido
- Pues, por un mes sí...estaré aquí - sonrió con un tenue y discreto sonrojo a la vista.
Las manos de Mikasa comenzaron a tomar fuerza al cerrarse lentamente.
Eren decidió soltarla y tomarla de nuevo, ésta vez por su cintura transmitiendo su calma.
- Está bien, toma el cuarto más grande si quieres -dijo el chico
El cual recibió una miraba bastante molesta de la azabache.
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- Bien...pues, pasen - dijo y los guió hacia una habitación, la cual estaba hasta atrás y en la esquina más escondida de la casa.
Ambas maletas quedaron al lado del castaño, quién se percató de que una de ellas estaba abierta. Se alertó y miró a Mikasa, demasiado tarde.
Se acercó y la abrazó por el cuello mientras envolvía el mismo con la bufanda mientras la apretaba.
- Tu tiempo en este lugar acaba de terminar -susurró en su oído para luego ir girando su cuello mientras se asfixiaba
- ¡Mikasa no! -replicó Eren pero ya era tarde, aquella chica se encontraba tendida en el suelo totalmente desnucada. Sólo cerró los ojos al escuchar el cuello de la chica tronar de una forma escalofriante
- No pensé que me serviría, aún así tengo que comprar un nuevo cuchillo, por si acaso - dijo mirando el cuerpo y agachándose para quitarle la bufanda
Al levantarse, la mirada preocupada del castaño llamó su atención. Mikasa suspiró y se acercó a él, acariciando su rostro.
- De verdad, te juro que ella es la última, no hay que fingir...ambos vimos claramente como te miró y de qué forma - habló dulcificando su voz
Eren suspiró y tomó sus manos e hizo que sus brazos rodearan su abdomen para abrazarse.
- Te creo...y confío en tu palabra - susurró
Mikasa asintió y comenzó a arrastrar el cuerpo fuera de la casa después de separarse.
- Ahora vuelvo...🎶 -dijo a tono cantado
Salió por varias horas, enterró el cuerpo lejos de la casa y cerca del mar.
Al volver encontró la casa ya más familiarizada y con sus cosas, entró a la habitación grande y se encontró al chico recostado en la cama. Volteó a verla y se levantó.
- ¿Todo bien? - preguntó acercándose
- Sí, ahora sí todo está bien - dijo abrazándolo por el cuello
- Pudimos esperar ese mes sabes? - dijo algo molesto
- No, claro que no, ¿Crees que me iba a arriesgar? Por su puesto que no -respondió de la misma forma que él, molesta
- ¿De verdad será la última vez? - preguntó ya más calmado
- Claro, ¿vez más chicas aquí? No, así que, ésta fue la última vez - relajó su tono y se acercaba poco a poco
- De ahora en adelante sólo seremos tú... -
- Y yo - complemetó la azabache
- Sin nadie más - dijo después, Mikasa solo se limitó a sonreír y recibir los besos de su amado chico para luego comenzar a "familiarizarse" con el nuevo lugar donde vivirían.
= Sin nadie más.....claro = pensó ella mientras se dejaba llevar
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