Las 15:00. Patrick y yo seguíamos en el castigo. Llevábamos ya media hora sentados mirando al frente sin poder hablar, hacer deberes o leer. Pasaron otros veinte minutos más hasta que el profesor Cornwell rompió el silencio.
— Bien, señores Stump y Rivers, espero que hayan aprendido la lección y que no vuelvan a hablar en mi clase. ¿De acuerdo?
— De acuerdo — respondimos Patrick y yo al unísono.
— Ya pueden marcharse. — Rápidamente, nos levantamos y salimos de allí. Dios, ¡qué aburrimiento!
Nada más salir, vi al mismísimo Pete Wentz saliendo de la clase de en frente. Me miró y sonrió. Sentí cómo mi corazón cada vez iba más rápido. Peter Wentz me acababa de sonreír. ¿Acaso estaba soñando? Y mientras que Patrick y yo nos íbamos acercando a la salida, miraba por el rabillo del ojo a Pete, que cada vez estaba más cerca de nosotros, hasta que, cuando nos quedaban dos pasos para salir del instituto, me dio un golpecito en el hombro. Me giré y le vi. Pete Wentz estaba en frente mía. Me paré de golpe, y Patrick, al ver que hablaba solo, se dio la vuelta y se puso a mi lado.
— H-hola — dije nerviosa. No sabía qué decir o hacer, no suelo hablar con chicos. Mejor dicho, no hablo con chicos. Bueno, excepto con Patrick.
— Hola, soy Pete — una sonrisa burlona asomó por sus labios. — Es que te he visto antes y me he dicho a mí mismo "Oye, yo conozco a esta chica" y cómo no he conseguido averiguar de qué me sonabas, he decidido venir a preguntarte.
— Oh, soy Kate. Tu taquilla está en frente de la mía, a lo mejor me conoces de eso.
— ¡Anda, es verdad! ¡Ya decía yo que te había visto yo en algún lado! Bueno, eso es todo. Ya nos veremos por el instituto. — dijo Pete, mientras que cruzaba la puerta.
— A-adiós. — me despedí mientras le veía marchar. Todavía seguía sin poder creerme que Pete Wentz acababa de venir a saludarme.
— ¡Vaya idiota! ¿Has visto cómo ha sonreído cuando se ha presentado? — dijo Patrick en un tono molesto. Me había olvidado completamente de que estaba allí. — "Hola, soy Pete" — repitió en un tono de burla. — Dios, ¡le tengo un asco a ese niño...!
— Pues a mí me cae bien. — solté. Patrick me miró con mala cara al escuchar mi comentario.
— ¿Te cae bien ese idiota? Si siempre está rodeado de sus queridos "amiguitos" que seguro que luego le ponen a parir por la espalda. Además, ¿no has visto cómo trata a las chicas? Cada semana tiene una novia nueva. Ha salido con casi todo el instituto. Creo que tú eres la única chica a la que no se ha tirado. — rió. Y la verdad es que tenía razón. Pete Wentz era un idiota, un capullo, pero no podía evitar sonreír cada vez que le veía.
— Ya...
Patrick y yo continuamos hablando durante el resto del trayecto. Cuando llegué a mi casa, tiré la mochila al suelo y me subí corriendo a mi habitación. Aún estaba alucinando por lo que había pasado hace unos pocos minutos, pero no estaba tan emocionada como antes. Patrick tenía razón, es un idiota, entonces, ¿por qué siempre que le veo siento la necesidad de sonreír? ¿Por qué su taquilla tiene que estar en frente de la mía? Ughhhh demasiadas cosas en las que pensar. Decidí que para despejarme un poco, iba a hacer los deberes, así al menos no estaré pensando en todas estas cosas. Bajé a por mi mochila y me puse manos a la obra.
Después de estar una hora devanándome los sesos con un problema de matemáticas, bajé al salón a ver un poco la tele. Necesitaba tener mi mente ocupada. Al rato, mi madre vino de trabajar.
— Hola, cariño. ¿Qué tal en el insti? — preguntó.
— Hola, mamá. Bien, como siempre.
— Por cierto, me he encontrado con la señora Stump, y me ha dicho que esta tarde Patrick se encontraba fatal y tenía fiebre, así que no cree que mañana pueda ir contigo al instituto. De todas formas, dice que mañana por la mañana te pases, por si acaso se encuentra mejor.
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'Cause after all this time, I'm still into you. //(Patrick Stump Fan Fic) | EDIT
Fanfiction-¿Por qué yo? -pregunté entre lágrimas. -Porque después de todo este tiempo, sigo enamorado de ti.