Casi dos horas habían pasado y seguían resolviendo varios acertijos. Hasta cierto punto River había recuperado confianza al estar con el capitán y también Christopher había logrado sentirse tranquilo estando a su lado, él mismo tenía sus dudas sobre si debía confiar en ella plenamente para algo tan difícil, pero ahí sentados en el suelo y ambos resolviendo todo el alboroto que su abuelo le había dejado, se daba cuenta de que River no era una mujer común, no llevaba mucho tiempo estando con ella pero en ese poco tiempo notó que ella era muy inteligente, sus pensamientos y formas de razonar lo dejaban boquiabierto. Y en un par de ocasiones ella terminó la oración de Christopher con tranquilidad, algo que ella no pasó por alto, pero Christopher comenzaba a mirarla con más atención, mientras ella seguía leyendo algunos libros que encontraron en aquella extraña habitación.
—No lo sé capitán, ¿está seguro que estos libros eran importantes para su abuelo? —preguntó levantando la mirada y lo sorprendió mirándola, pero él no dejó de hacerlo y ella claramente perturbada bajó la mirada al libro de nuevo. Christopher sabía que ella era hermosa, sus rasgos eran únicos, una cara que jamás olvidarías, unos ojos soñadores que sonreían más que su boca y de alguna forma eso le encantaba de ella. <<Mierda, ella no, no puedo caer de nuevo, solo olvídalo...>>, pensó Christopher regañándose a sí mismo y a duras penas le quitó la mirada de encima.
—Sí, eran sus favoritos, estoy completamente seguro de que ocultó algo en ellos.
—Yo no estoy tan convencida, pero puede seguir buscando, yo buscaré en el directorio que encontramos.—dijo finalmente y se paró, claro a los ojos de Christopher fue a cámara lenta, ella no llevaba ropa especial, unos vaqueros de su talla unos botines negros y una blusa negra, no había nada provocativo en el conjunto, pero la mente de Christopher Willmont nunca se detenía a pensar en la ropa, su mente comenzaba a divagar más allá, <<Sin duda lo que se oculta por debajo es suave y caliente, necesito acariciarla y hacerla mía justo en este piso...>>, pensó mirando sus curvas mientras mordía su labio inferior, comenzaba a hacerle agua la saliva, nunca podía controlarlo, cuando él quería saciar su deseo tenía que hacerlo en el momento, bajando la mirada notó que una gran erección se apoderaba de él, ¡No entendía por qué, si ella no lo había provocado! Ella no había dicho nada para ponerlo en ese estado, y solo siendo ella lo había dejado en la lona. Y cuando estaba a punto de ceder a su deseo por alguna razón se detuvo e intentó respirar... estaba muy ansioso y si no pensaba claro acabaría tomándola justo en el escritorio de su abuelo.
— ¿Capitán? ¿Se encuentra bien?— le cuestionó la voz de River notando su nerviosismo y él se giró para que ella no notara su virilidad.
—Tengo que hacer algo urgente, volveré más tarde... —dijo con voz un poco entrecortada y salió del escondite y de su oficina.
River no sabía por qué se comportaba así de repente, él era el más entusiasmado con la idea de ayudarle y de repente se iba, pero claro era ilusa se sentía tranquila puesto que no había notado nada malo en el con el tema de ser un Sátiro, le había parecido tranquilo y honesto, así que tranquila continuó buscando la formula.
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Cuando se trata de ti
RomanceEn el mundo hay dos clases de mujer, perfectas y preparadas para todo lo que se propongan justo como Dita Parker o despistadas sin saber cual es el siguiente paso en su vida... justamente como River Parker, quien con un carisma impresionante como a...