En el mundo hay dos clases de mujer, perfectas y preparadas para todo lo que se propongan justo como Dita Parker o despistadas sin saber cual es el siguiente paso en su vida... justamente como River Parker, quien con un carisma impresionante como a...
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— ¡¿Por qué mierdas me estás pidiendo que me quede en mi habitación Christopher?!— gritó Dita enfadada con su Martini en la mano y presumiendo de su bikini morado.
—Ya te lo expliqué, si mi familia te ve junto a Halley pensarán inevitablemente que ella es la Doppelganger.
— ¿Y que si lo saben? Se supone que el asesino es por parte de mi familia, no de la tuya.
—No lo sabemos aún como para que puedas confirmarlo, Gary mi hermano está aquí y créeme, no le faltarían ganas de matarme con tal de quedarse con mi barco. Le dijo unas cosas a Halley... y si el tuviera algo que ver podría significar no solo la muerte de tu hermana, si no la mía y la perdida de mi puesto... ¿eso quieres? ¿Te recuerdo que soy el único que te da acceso BIP en todos los pisos del Ferri? — Dita se llevó la mano al pecho indignada y después miró al cielo.
—Sabía que algún día llegaría este día, pero bueno... no quiero que pienses que soy una interesada...
—Oh, ¡Aquí están! —Gritó Gary ya con ropa de playa perfectamente elegante, sonrió y se acercó a ambos, Dita miró a Christopher y le guiñó un ojo.
—Sígueme la corriente... —susurró Dita y miró sonriente a Gary.
—Oh, ¡Creí que nos veríamos hasta esta noche!— gritó Dita intentando apagar su voz habitual e intentó imitar a River. —Espero que no te moleste que haya querido tomar el sol un momento con Christopher, mi... prometido. —tartamudeó un poco y tomó a Christopher de la mano.
— ¿Vaya, así que le dices Jack y de un momento a otro es simplemente Christopher? Curioso. —se burló sonriendo Dita respiró hondo.
—No le veo mayor problema, yo a ti te llamo por tu nombre y otras tantas te llamo imbécil. No hay diferencia. —Soltó Christopher pero al parecer dichas palabras no le habían afectado a Gary, pues él seguía con esa sonrisa presumida.
—En fin, solamente quería tener la oportunidad de poder platicar con Halley, sus planes me han parecido interesantes, ya sabes... tener una charla profunda del tema. —Christopher entrecerró los ojos un poco celoso pero también nervioso pues sabía que la mujer que estaba a su lado era Dita y ella no sabía nada del tema, más que solo de maquillaje, moda y pasarelas. Pero no tuvo que decir nada puesto que Dita salió sola del problema.
—Claro sería un placer, te veré en diez minutos en el bar del Ferri, me cambiaré y estaré contigo. ¿De acuerdo?— preguntó tranquila y Gary asintió con esa paz tan extraña que solo el poseía.
—Solo recuerda que es mi prometida, te lo digo porque... si vas de tras de mi barco... no quiero que después vayas de tras de ella también. —comentó Christopher pero Gary solo le dio la espalda y se retiró.
—Si me preguntas... creo que sí, creo que tiene un extraño interés en River...
