En el mundo hay dos clases de mujer, perfectas y preparadas para todo lo que se propongan justo como Dita Parker o despistadas sin saber cual es el siguiente paso en su vida... justamente como River Parker, quien con un carisma impresionante como a...
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— ¿Entonces... tienes una madre y es abogada?—preguntó Christopher mirando a Halley quien se asomaba por la habitación que le había pertenecido por décadas. —Suena bastante real para todo el mundo de fantasía mitológica de la que nos hablaron.
—Yo no sé qué haré si ellos no pueden quitarme esta cosa que yace dentro de mí. —Dijo con profunda tristeza mirando las estrellas hasta que sintió como los brazos de Christopher la rodearon. —Estoy condenada... por la eternidad.
—No, yo hablaré con mí otra parte, ellos te quitarán esa cosa y regresaremos al Ferri, ¿y sabes que pasará?—Halley lo miró aun con el semblante lleno de tristeza y se giró frente a él. —Dejaré que Ana y tú se encarguen de organizar nuestra boda...
—pero... pensé que ya estábamos casados...
—Sí, lo estamos, pero fue un error el haberlo hecho como lo hice, así que fingiremos que no pasó así y tendremos una boda falsa donde nos veremos profundamente enamorados y donde por supuesto, tú me darás el sí. —Halley soltó una pequeña risita al escucharlo tan seguro de sí mismo y luego regresó su mirada afligida. —ya no quiero que pienses en ello, llegaremos hasta el final para solucionarlo.
— ¿Cómo serán ellos?
—Dije que basta, Halley, no quiero escuchar más del tema por esta noche...—la detuvo un poco estresado pero, ella continuó.
— ¿Pero es que no te da curiosidad el saber cómo son ellos?
— ¡River dije que ya basta! —gritó fuera de sí presionando los brazos de Halley con cierta rudeza, algo que le impresionó pues, los ojos de Christopher parecían casi salirse de las cuencas. Ella se quedó callada y de un segundo a otro Christopher reaccionó como si hubiera sido poseído, de inmediato soltó los brazos de Halley y parpadeó varias veces. —Yo... perdóname amor, no sé qué acaba de ocurrir... yo, yo saldré un momento al auto... necesito pensar muchas cosas... —dijo finalmente y salió de la habitación dejando a Halley sola mientras que Aramís llegaba con varios cobertores y observaba la escena cuando Christopher salía.
—Que sepas que ese comportamiento es normal en él, siempre que ustedes llegan aquí pasa esto, empiezan a sentir su verdadera personalidad, y como Christopher es Anubis y él es un chacal... tiende a ser temperamental.
— ¿Cómo lo ayudo? No me gusta verlo así tan... presionado, ¿desesperado? No lo sé. —Aramís sonrió al verla tan mortificada que se acercó a ella y la abrazó de una forma paternal, para su sorpresa esa no se negó a abrazarlo, pues sabía que también estaba despertando sus recuerdos del pasado.
—En verdad lo amas, ¿cierto? —le preguntó sobando su espalda mientras que ella guardaba silencio unos segundos.
—La forma de nuestro matrimonio no fue como yo lo hubiera planeado, ¿sabes tío? Pero... creo que él intenta ayudarme, quiere enseñarme como es el mundo y puedo sentir que él no está del todo bien, no sé cómo eran las versiones pasadas de Christopher pero, esta versión está muy dañada.
