12. Tus "lo siento" saben a mentiras

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Luke duró unos aproximados 20 minutos tocando la puerta y suplicándole al teñido que abriera, pasó otros 10 minutos recargado en ésta solo escuchando a su amigo maldecir, y finalmente optó por tomar el picaporte y girarlo, llevándose la sorpresa de que la puerta no estaba cerrada con seguro, se preguntó desde cuándo, o si alguna vez había tenido el seguro.

Cuando por fín se adentró en la habitación cerrando a sus espaldas pudo ver a su amigo sentado en el centro de la cama, de perfil, viendo hacia donde se encontraba el baño, éste sin girarse bufó.

- ¿Media hora para notar que estaba abierto? - dijo, su voz sonaba tan rasposa y quebrada a la vez, a Luke le rompía el oírlo así, se acercó a él sentándose justo a su lado en la cama
- Mikey...
- Fue un estúpido plan - masculló
- Yo...yo lo sé - intentó poner su mano sobre el hombro del teñido pero éste se movió de inmediato.

Se levantó y caminó hacia el baño, se encerraría de nuevo, pero el rubio no podía dejar que su amigo siguiera huyendo de él, realmente necesitaban hablar, así que corrió hacia el baño y se interpuso entre éste y el chico.

- Mike por favor...solo escúchame
- ¿Qué vas a decir? ¿Qué no era tu intención hacerme daño?
- No era mi inten...
- ¡Oh cállate! - exclamó el teñido, sus ojos ya rojos volvieron a cristalizarse - solo cállate Luke, no estoy de humor para escuchar patéticas excusas
- Mira, Mike...yo...mi intención nunca fue hacerles mal, a ninguno de ustedes...fue un plan de Cal por que Ash...
- ¡Basta, Lucas, en serio!

Ambos se quedaron en silencio, el azul y el verde de sus ojos fusionándose. Las lágrimas del mayor empezaron a caer, sin prisa, como si fueran las últimas que le quedaban, a Luke no le sorprendería que fuera así, los ojos del teñido estaban tan hinchados que solo suponía que había estado llorando desde el momento en que se encerró. Pasó su mano derecha por la mejilla de su amigo y éste volvió a sollozar, cerrando sus ojos con fuerza y moviendo al rubio de su camino.

- Solo vete - dijo, empujándolo e introduciéndose en el baño, el menor logró entrar también, sin cerrar la puerta
- Michael escúchame - empezaba a perder la paciencia ¿Por qué se estaba comportando así? ¿Por qué Mike parecía tan dañado si solo había sido una mala broma?
- ¡Te pedí que te vayas! - gritó el teñido empujándose a sí mismo contra la pared, anhelando el espacio
- ¡Pues no lo voy a hacer! - gritó él también, al ver la reacción de su amigo se intentó calmar, no quería hacerle más daño - no hasta que me escuches.

Mike mantuvo la mirada baja, pequeños sollozos salían de sus labios, mientras aún resbalaba una que otra gota por sus mejillas. Luke lo sentía, en serio estaba arrepentido, sabía que hacer el plan era algo tonto, pero nunca pensó que le haría tanto mal a Mike, que lo vería tan destrozado y por su culpa.

- Mikey...y-yo l-lo siento...fue una estupidez y...
- Luke no quiero oírlo, quiero estar solo.

El rubio suspiró y dio un paso hacia atrás, justo cuando Mike pensó que se iría éste volvió a hablar.

- No hablaré si es lo que quieres, solo déjame estar aquí para ti - Michael soltó una bocanada de aire, causándole un extraño escalofrío a su amigo, y negó repetidamente con la cabeza
- Deja de ser tan jodidamente terco y lárgate.

Y aunque eso hirió lo suficiente al menor, no se movió, se quedó inmóvil viendo al teñido, apretando su quijada y quizá sus puños también, la entera situación lo estaba estresando...Mike lo estaba volviendo loco, entonces haría lo que hacía mejor cuando necesitaba desahogarse, cuando lo único que quería era distraerse y ser feliz, aunque fuera por unos momentos.

Caminó de vuelta hacia Mike, él era el único que podría entenderlo así, era aquel que lo hacía feliz cuando nada más podía, entonces le devolvería ese favor, le quitaría el dolor de su pecho y se lo instalaría en otra parte, una donde si pudiera eliminarlo...

Waste The Night - MukeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora