Waste The Night - Muke

25. ¿Recuerdas nuestras primeras veces?

Michael subió las escaleras corriendo, ansioso de contarle a su amigo lo que había sucedido hoy en su camino a casa, pero se detuvo al escuchar las cuerdas de la guitarra resonar en la habitación del rubio. Se recargó contra la puerta para escuchar la voz de Luke, y no pudo contener una sonrisa al escucharlo tararear y murmurar una que otra frase.

~ You only ever wanna love me after midnight
You only ever wanna love me after midnight
I've never seen you in the daylight... ~

Michael sintió su corazón achicarse, la letra era linda, la melodía suave, le gustaba como la voz de su amigo encajaba a la perfección con los acordes, pero algo lo hacía sentir demasiado personal...además de que era lo primero que el menor componía desde que habían terminado con el tour, cosa que emocionaba al teñido.

Abrió la puerta despacio, intentando no hacer ruido para poder espiar al rubio, el cual descansaba recostado en su cama, con la guitarra encima y tan solo un cojín sosteniendo su cabeza. Su expresión era de extrema concentración, los ojos cerrados, los labios ligeramente entreabiertos, soltando murmuros que no lograba comprender. Su perfecta nariz respingada que se arrugaba cuando algo no le gustaba al menor. Tenía una pierna doblada, con su pie pisando la cama, mientras la otra colgaba tranquila.

~ Cause you only ever wanna love me after midnight
But it's better than nothing... ~

Mike avanzó hacia el chico, tratando de cerrar a sus espaldas en silencio, Luke aún estaba absorto en la música, que no se percató de la presencia del teñido hasta que éste se inclinó frente a él y le depositó un leve beso en los labios, sobresaltándolo.

- ¡Mikey! - gritó sonriente, dejando la guitarra a un lado e incorporándose para poder hacerle espacio a su amigo, éste rápido se tiró a su lado, pasando sus brazos al rededor la los hombros del rubio
- Eso sonó bastante bien
- ¿Lo escuchaste? - preguntó, levantando su cabeza del hombro del mayor, éste simplemente asintió
- Me gustó
- Solo estaba perdiendo el tiempo - Michael rio ante el tono apenado del chico, y lo apretó con más fuerza contra su pecho.

- Bueno, si esa fue una manera de matar tiempo, ya muero por escuchar algo a lo que si te comprometas
- ¿Cómo te fue hoy? - cuestionó tratando de cambiar el tema, con las mejillas ligeramente coloradas
- Increíble, venía caminando y como a dos cuadras de aquí me encontré con una muchacha que traía dos perritos, obvio me agache a verlos y acariciarlos, y cuando levanto la mirada para preguntarle sus nombres, wow - el rubio frunció el ceño - ¿Quién crees que era?

- ¿La conozco?
- ¡Todos lo hacen! - gritó emocionado
- Está bien, no tengo ni idea
- Selena Gómez - Luke se separó de inmediato de su amigo para poderlo ver a la cara
- Estás bromeando
- Te juro que no
- ¿Qué hace aquí? ¿Te tomaste una foto con ella? ¿Conversaron o...?
- Tranquilo, Lu - rio - mira.

En el segundo en el que el rubio observo la foto soltó un grito ahogado, provocando que al teñido se le escapara una pequeña risita.

- En el primer instante en el que la ví sentí que iba a desmayarme - el rubio rio, devolviéndole el celular y regresando a su antigua posición, entre los brazos del chico
- Finalmente puedes decir que una sola mirada te robó el aliento - musitó entre risas, pero el teñido no se le unió, al contrario, soltó un pequeño gruñido
- Bueno, no fue la primera
- ¿De qué hablas?
- Ammm y-yo...bueno, la primera vez que te...p-pues...

Michael suspiró, si Luke hubiera sido capaz de girar su cabeza hasta ver el rostro de su amigo, se hubiera topado con un par de mejillas más que coloradas. Pero aun así, escondido entre los brazos de Mike, el rubio podía sentir el nerviosismo del mayor.

- ¿Mikey?
- ¿Recuerdas cuando nos conocimos?
- ¿Te refieres al primer "hola" o la primera vez que te ví?
- El "hola" - musitó, casi sin voz - la primera vez que me viste estoy seguro que fue distinta a cuando yo te ví
- Calum nos presentó - prosiguió el menor, Mike simplemente asintió - me viste tan feo y en aquel momento no comprendía el porque, supongo que desde entonces me caiste mal, me pareciste algo... - él rio - bueno, eso no importa ya.