Waste The Night - Muke

17. Shh no querrás que nos escuchen

Luke había abrazado al teñido en cuanto le dijo que podía perdonarlo, ambos se tiraron de costado sobre la cama, enredando piernas y brazos como si intentaran buscar refugio en el otro. Sin decir nada más por un par de segundos, con un tacto firme, casi como si temieran que el otro les fuera arrebatado. Finalmente, fue el rubio el que sacó la cabeza del hombro de su amigo para poder hablar de nuevo.

- Es tu turno - murmuró
- ¿De qué?
- De decirme por qué te alteraste tanto
- Y-yo... - Mike no consideró que el menor le cuestionaría eso...era algo obvio y no se había dado cuenta que no tenía preparado que decir, Luke notaría si le mentía, además de que realmente no se le venía ninguna buena excusa a la cabeza...pero decir la verdad, declararse enamorado del chico que ahora lo miraba con somnolientos ojos...no, no podía arriesgarse a que lo apartaran de los brazos que ahora lo mantenían estable.

- Es muy tarde, Lukey - inició, cerrando sus ojos - lo hablamos por la mañana
- No, Mike - sentenció sentándose de vuelta - ya iniciamos esta conversación y creo que sería bueno concluirla
- Pero estoy cansado
- No, solo estás buscando excusarte para quedarte callado.

El teñido suspiró sentándose al lado de Luke, el cual lo observaba expectante. Los ojos de ambos se observaban tan cansados que no les sorprenderías si alguno se empezaba a dormir a la mitad de la nueva explicación, pero tampoco era como si el menor pudiera esperar más para entender. Mientras el rubio rogaba porque Mike empezara a sincerarse y a eliminar los obstáculos que les impedían mudarse juntos, el teñido idealizaba que decir y que no. Decidió contar la verdad...solo una parte de ella.

- Y-yo...es algo patético, Luke
- No importa, es lo suficientemente importante para hacerte reaccionar así
- Mierda - masculló, removiéndose un poco sobre las sábanas - tú sabes que soy muy inseguro - el rubio asintió un par de veces - y no suelo sentirme muy querido por...nadie - suspiró - pero cuando estoy con ustedes 3 las cosas cambian, me hacen sentir que no estoy solo y...en serio lo aprecio...en serio los quiero.

Luke colocó sus manos sobre cada una de las rodillas del chico tembloroso que tenía en frente, intentando transmitirle calma, diciéndole que siguiera sin prisa, que él lo escucharía. Mike después de varios suspiros logró volver a encontrar las palabras para continuar.

- Pero contigo siempre ha sido distinto...no puedes decir que somos dos mejores amigos normales, Lu sabes que no lo somos - Luke asintió levemente, no separando su mirada de la del teñido ni por un segundo - los mejores amigos no se besan solo porque sí, no se seducen o actúan sexualmente hacia el otro...no se meten el pito del otro a la boca
- ¡Michael! - exclamó el rubio empujándolo un poco desde las rodillas, una sonrisa se plasmó en el rostro del mayor antes de continuar.

- El hecho de que siempre haya sido diferente entre nosotros me hacía sentir especial - prosiguió - era el único hombre que tenía permitido besarte, era el único que podía abrazarte todas las noches si quería, era el único que te hacía jadear, Dios - el menor no tardó en sonrojarse y bajar la mirada - tú eras el único que me hacía jadear a mí...por eso te odié tanto cuando apareciste a Arzaylea, porque me sentí remplazado...en parte lo fui - Luke empezó a negar con la cabeza, y en el instante en el que abrió la boca para objetar Mike alzó la mano pidiéndole silencio - aun así, una parte de nuestra perturbada amistad seguía en pie, seguíamos siendo Luke y Mike...el mismo mundo seguía viéndonos como algo distinto...porque yo seguía siendo el único hombre al que habías besado y tú seguías siendo el único al que yo quería besar.

Se detuvo por un momento, estaba yendo muy lejos, realmente estaba diciendo cosas que pensaba nunca saldrían de su boca, mucho menos frente al chico de los bonitos ojos azules que ahora lo miraban intrigados. ¿Se había excedido? ¿Acaso Luke sería capaz de leer entre líneas? Dios, rogaba por que no fuera así.