Nunca Me Olvides

25

Narra Wendy

Salí del baño y me dirigí a mi puesto de trabajo pero me sorprendí al ver quien estaba ahí.

Wendy: ¿Rubén?. Digo sorprendida.

No podía creerlo aún, era mi hermano mayor y realmente no entiendo que hace aquí, pero ya que, no tengo otra opción que ir a saludarlo.

Fui a su lado y lo quedé mirando seria por un momento hasta que él me miró.

Rubén: Wendy, hermanita. Dice amablemente.
Wendy: ¿qué haces aquí?. Lo miro seria.
Rubén: oye, no seas así conmigo hermanita...
Wendy: ¡ni se te ocurra decirme hermanita otra vez! ¿escuchaste?. Digo molesta.
Rubén: por favor Wendy, ya deja de tratarme así.
Wendy: ¿cómo quieres que trate a alguien que intentó separarme de mi novio hace casi ya 8 años?. Cruzo los brazos.
Rubén: ese tal Raymond no era bueno para ti, y aún así no entiendo porque dejaste a Alessandro por ese mal nacido.
Wendy: ese estúpido de Alessandro solamente me quería para la cama y tú como hermano no hiciste nada al respecto y te prohíbo que vuelvas decirle así a Raymond. Digo molesta.
Rubén: pero si es lo que es, pero bueno, solamente vine para llevarte otra vez a Guatemala.
Wendy: ¿qué?. Digo atónita.- ¿regresar a Guatemala? ¿pero porqué? si a penas llegué hace unos cuantos días.
Rubén: la academia de música te necesita, así que ve por tus cosas y vamos al aeropuerto.
Wendy: se supone que tú te encargarías de la academia mientras yo estaba aquí en Puerto Rico...
Rubén: sabes que es mucho trabajo para mi y no puedo hacerlo sólo así debes que venir conmigo y punto. Dice serio.
Wendy: ¡no lo haré!, se supone que cada 6 meses se encarga cada uno de la academia y en esta ocasión es tu turno Rubén.
Rubén: Wendy, lo estoy haciendo por las buenas pero si sigues así con esa actitud me obligaras a hacerlo por las malas.
Wendy: atrévete a ponerme una mano encima y verás como te rompo la cara.

Los dos seguimos discutiendo por un rato y había momentos donde él me gritaba y me miraba molesto, y así hasta que estuvo a punto de golpearme pero alguien lo detuvo justo a tiempo.