Capítulo #44

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—¿Cómo te fue?—le pregunte a Mai al verla cruzar la puerta.

La lobita escondió la cola entre las patas y me miró como si trajera malas noticias.

—No pude sacarle nada, está renuente a decirme el paradero del corazón de la hechicera.

Apreté la mandíbula, no saber el paradero del corazón de la hechicera, aún me causaba cierta desazón. Algo dentro de mí me decía que no era buena idea no saber de su paradero a pesar que aparentemente la hechicera había sido sellada con éxito está vez, al impedir que siguiera absorbiendo los poderes de la estrella.

—Seguiré buscando, No hay nada que se escape ante mi olfato pero esto está siendo mucho más difícil, como  si algún objeto místico escondiera su olor. Algo que quizá ya hemos visto pero hemos pasado por alto.

Trate de repasar en mi mente, algún objeto extraño que halla visto en la mansión pero nada me parecía adecuando para resguardar un corazón vivo, en su máximo esplendor.

—No lo se—respondí con pesar, debíamos encontrarlo antes que alguien intentará aprovecharse de el, tal y como lo había hecho Taro.

—Taro ha estado muy nervioso durante el interrogatorio con Shun y eso me hizo pensar que el objeto no está en la mansión si no mucho más cerca de nosotros de lo que esperamos.

—¿A qué te refieres?¿Crees que alguien más este involucrado?

El pelaje del pequeño lobo se erizo al voltear en la dirección que venían las risas melancólicas. Quizá era el aura extraña que desprendía aún Naruto después que nos tenía acostumbrados a una aura más calida pero no supe entender a que se refería.

—No importa, quizá solo son suposiciones pero seguiré vigilando.

Asentí y recordé a Shun

—¿Donde esta Shun?

—La aldea la solicito y como la hechicera fue sellada. Me imagino que su misión termino.

En ese momento recordé que no solo Naruto había perdido a alguien si no también Shun y después de todo lo que me había ayudado, lo menos que podía hacer de vuelta era ayudarla a encontrará al resto de su familia.

—Se que no es parte de la misión pero después que todo esto termine y podamos encontrar el corazón de la hechicera me gustaría pedirte otra cosa

La lobita asintió dando un pequeño ladrido que llamo la atención de toda la habitación, haciendo que Sakura se reuniera conmigo, después de revisar una última vez a Hinata.

—¿Que sucedió?—pregunto observando nuestras caras de preocupación.

—Aun no he logrado encontrar el corazón de la Hechicera.

Le hizo saber Mai echándose en la alfombra y quedándose totalmente dormida después de un largo día.  Sakura río bajito mientras me tomaba del brazo, la noche casi estaba entre nosotros pero era casi imposible que la pasáramos aquí, junto a Naruto y Hinata.

—Creo que es hora de irnos

—Yo también lo creó

Nos despedimos de Naruto, dejándole el espacio para que pudiera recuperar el tiempo perdido con Hinata. Que hablaran y tratarán de llenar los huecos que la ausencia de cada uno había dejado.

Solo yo sabía que ese tiempo había sido mucho más corto de lo que imaginaban y que sus recuerdos a pesar de que ya existían con Naruto, había sido cambiados. No me podía imaginar como se sentirían en este momento pero sabía que nadie los volvería a separar jamás.

Siete DiasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora