Aquí va el capi de hoy... seguimos con la fiesta de la Dependencia... o con los estragos de la fiesta jejeje
POV MIMI
- Miriam - llevaba siguiéndola un rato y llamándola, pero nada, ni caso - ¡Miriam! - grité, más alto esta vez - ¿Puedes parar? - y lo conseguí. Se paró... pero cuando llegué a su altura quiso echar a andar otra vez, pero conseguí retenerla cogiéndola del jersey... y agarrándola, acto seguido, de la cintura pegando su espalda a mi abdomen - ¿me lo explicas? - le pedí con un tono todo lo calmado que pude, dada la situación- por favor - casi fue una súplica, cuando vi que ni siquiera iba a hacer el intento de darse la vuelta.
- Yo, yo, tengo...
- Miriam, no pasa nada, ¿vale? - apreté su agarre - querías experimentar...
- No es eso, me cortó- aun de espaldas a mí
- Vale, no es eso... entonces, ¿me lo explicas? - conseguí ponerme frente a ella y agarrarle la cara para que me mirara. Intenté mostrarle que no pasaba nada con una sonrisa comprensiva y le quité alunos mechones de pelo de la cara - por favor - le supliqué
- Mimi, es que yo no sé lo que me pasa - sollozó y se escondió en mi cuello - no sé lo que me pasa contigo - aclaró...
- Vente aquí, mi amor - con ella abrazada a mi cuerpo y sin levantar la cabeza de mi cuello, como pude nos guie hasta un banco cercano en el que la senté, colocándome yo de cuclillas enfrente suyo
- No, no me llames así - me dijo de forma entrecortada
- Vale. Pero tu sabes que yo soy así, ¿verdad? un poco cursi - intenté bromear - ¿me cuentas lo que te tiene así? - se encogió de hombros - venga, reina...
- No, así tampoco - me volvió a cortar - es que así llamaste a Ana... - hizo una mueca de asco.
Las dos habíamos bebido en la fiesta. Ella menos que yo, pero parecía que le había afectado más, aunque yo hubiera bebido el doble que ella... pero que me pusiera esas muecas, mostrándose como una cría pequeña porque gruñía y se cruzaba de brazos como si fuera su hija no me ayudaba a no comerle la boca para deshacer cada uno de sus miedos.
- ¿Te molesta que llame a Ana así? - mis brazos estaban apoyadas en sus muslos y con mis manos le sujetaba la barbilla para que no agachara la cabeza y me sostuviera la mirada - ¿por qué, corazón? - puso una mueca de desagrado - vale, vale, perdón, ¿por qué asquerosa? - quizá apelativos no cariñosos le gustaban más... sonrió y yo la imité. Fantástico, al menos me sonreía, eso tenía que ser buena señal.
- ¿Por qué eres tan buena conmigo? - me preguntó apenada
- Mi niña, eso no te lo puedo explicar... porque no creo que sea verdad. Yo solo hago lo que me sale de aquí - me señalé el pecho
- Gracias - empezó a pasear sus manos por mis mejillas, mis orejas, mi cuello... yocerré los ojos ante su contacto y me dejé hacer durante unos ¿segundos? ¿minutos? ¿A quién le importa el tiempo que pasara disfrutando de su contacto así?
- ¿Por qué, preciosa? - le acaricié la barbilla cuando abrí los ojos y vi como me miraba. Ella se levantó y tiró de mis manos, no sé si ella lo tenía previsto o no, pero cuando quise reaccionar, tenía sus labios sobre los míos y su lengua pidiendo paso... - Miriam - me separé del beso y la intenté frenar... ¿y por qué no me dejaba llevar? Porque ya había pasado antes por aquí. Al día siguiente se arrepentiría y yo me quedaría hecha una mierda. Ella volvió a juntar nuestros labios - Por favor - me volví a separar... No quería que se sintiera mal, que se sintiera rechazada. ¡Dios! Que me besara Miriam era lo único que necesitaba para encoñarme más de ella... no podía... porque... ¿qué iba a pasar mañana? No, no podía dejarme llevar.
ESTÁS LEYENDO
¿Te atreves a recordar?
Fanfiction¿Qué puede ocurrir cuando ya no esperas nada de tu matrimonio? ¿Qué pasa cuando la relación se ha sumergido en una profunda crisis sin, ni siquiera, darte cuenta? ¿Qué pasa cuando no esperas nada de la persona que, supuestamente, iba a ser tu comp...