Fuerza, valentía, audacia. Tres cosas que no te pueden faltar en mi mundo. Lastima que algunas veces reemplazamos una de ellas por debilidad, el sinónimo del amor. No estábamos hechos para estar juntos. Mafiosos y justicieros estaban destinados a estar separados, a ser enemigos. No debió pasar. Yo estaba prohibida. Él no debió fijarse en mi... Yo no debí caer por él. Romper las reglas nunca se sintió tan bien. Incitar a romperlas nunca fue mi cometido.