⚓Capítulo 10⚓

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Los alumnos uno a uno fueron cayendo como troncos a causa del cansancio. Umi se los había advertido y todos dieron el máximo de si mismos, pero que caro le salió su primer entrenamiento del día.
Viendo a los jóvenes, suspiró frustrada a causa de lo que sus ojos ven y se acercó a sus armas recostadas sobre un tronco, tomándolas para poder cargarlas con una bala algo especial.

-Yo les advertí que no debían dar todo de sí. -suspira y carga el arma- ahora ni siquiera podrán dormir por el dolor que sentirán, pero bueno, no importa, nunca escuchen a la capitana Umi.

Llevó el brazo hacia arriba apretando el gatillo, así disparando con potencia. La bala llegó hasta cierta altura, comenzó a sobrecalentarse y explotó con fuerza provocando una nube roja.
La tripulación entera al ver aquella nube, dejaron de hacer lo que estaban realizando para ir en dirección de la zona de entrenamiento; vaya sorpresa se llevaron cuando los 20 alumnos estaban hechos polvo hasta el alma, sin decir palabra alguna observaron a su capitana y ella se encogió se hombros, haciendo que volvieran a ver a los postulantes a héroes, compartiendo el mismo pensamiento.

"Son idiotas de agua dulce"

Con ayuda de sus subordinados, cada uno de los 10 sujetos que forman parte de la tripulación del fantasma carmesí tomó a dos alumnos, llevándolos como costal de papas. Con seriedad observó la fila india que hicieron los marineros, maldiciendo la falta de obediencia y disciplina de los alumnos, tal vez debería ponerlos rectos de antemano.

-Tus alumnos tienen potencial Aizawa-san, solo son sordos ante las advertencias. Corrige eso antes de que realmente se lastimen. -el nombrado simplemente la observa en silencio y ella se pone las manos en la cintura, observando el cielo- Andando, de noche este lugar es peligroso.

-¿Por qué? ¿Acaso te da miedo la oscuridad de la noche? -ríe burlón el héroe número dos- 

-No me da miedo la oscuridad, sino lo que habita en ella.

Ambos hombres tuvieron un pequeño escalofrío en sus cuerpos, acelerando el paso, pues lo dicho por la mujer no les da buena espina... ¿qué será que habita en la oscuridad de esta isla?.
Tal vez la única persona que lo sabe es la pelirroja, pero jamás diría lo que ronda por las noches, atormentando los sueños de los niños y adolescentes, asesinando a borrachos que lo o la desafían y raptando a jóvenes doncellas bendecidas con una belleza sin igual.
Los ancianos lo saben, los sobrevivientes lo/a conocen, y los miedosos callan, pues al apagar las luces, su territorio comienza, oliendo a su siguiente víctima que se queja de la vida que lleva pero que luego, mientras es llevada por sus garras oscuras y manchadas con sangre, busca el refugio en los brazos de una madre...que nunca más vuelve a ver.

Aunque solo ocurre una vez al mes, la presencia de la pelirroja ahuyenta a la criatura, siendo esta una especie de barrera entre la vida y la desgracia por la pérdida de un ser amado.

Luego de que los alumnos se dieran un buen baño, cenaran y durmieran, la pelirroja salía de su habitación ya aseada pero vestida como toda una capitana, portando con orgullo su sombrero y armas

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Luego de que los alumnos se dieran un buen baño, cenaran y durmieran, la pelirroja salía de su habitación ya aseada pero vestida como toda una capitana, portando con orgullo su sombrero y armas.
Endeavor que salía de su habitación, observó a la mujer pasar frente a él, mirándola de arriba a bajo.
Le intriga y le gusta la manera de ser de la mujer, lo humilló, sí, pero ella es alguien difícil de roer, ni siquiera le dirije respeto a pesar de ser una persona superior, ella lo ve como basura.
Saliendo de su trance, observó como ella se topa con un recién vestido Aizawa,en pijama claro está, hablándole con una sonrisa, apuntando con el dedo pulgar hacia una dirección.
Shota parecía pensarlo un poco hasta que apuntó en dirección del flameante héroe, la mujer se notó enojada y se cruzó de brazo frunciendo bastante el ceño. Aizawa entró a su habitación para cambiarse y nuevamente salir, caminando hacia Endeavor que se encuentra observando embobado a la mujer que lo mira con odio.

-Oe...,Umi conoce un bar aquí cerca, vayamos. Aunque no creo que bebas...

-Claro que lo hago. -se cruza de brazos- vayamos ahora.

Ruby al ver que ambos hombres se acercan a ella, un bufido salió de lo más profundo de todo su ser, solo quería irse con Aizawa pero él tenía que invitar al sujeto que ahora apoda "escoria de última hora".
Ninguno decía nada en el trayecto, mejor para los tres; cuando sus pasos se detuvieron frente a una taberna, abrió la puerta y el cántico de su tripulación y de otra más llegó a sus oídos, escuchando la canción de piratas.

-Bienvenidos al bar "Perico llorón". Espero que tengan buena resistencia con el alcohol, aquí sirven la mejor cerveza artesanal que hace que hasta tu alma se emborrache.

-Lugar ruidoso... -Aizawa observa alrededor- pero acogedor.

-Claro que es acogedor! Ya verás que te gustará estar aquí. -se acercan a la barra y los tres toman asiento- Pero como es la primera vez que están aquí, déjenme les pido algo.

Saludando al hombre que los atiende, pide dos tarros de cerveza y una copa de vino junto a la botella. Sin tiempo que perder, el musculoso hombre canoso con una cicatriz en el ojo izquierdo, anota su pedido, hace una reverencia y va a por lo ordenado.
Los tres comenzaron a hablar, aunque Endeavor y Ruby ponían un tono de desagrado cuando se hablaban entre los dos; lo pedido por la pelirroja llegó y junto a ello llegó un plato con pescados fritos en unos palillos, obviamente los tres observaron al servidor y este anunció que es una invitación de la casa.

Primeramente comieron aquello, pues no deseaban que el alcohol se les subiera muy pronto, los emborracharía en un tiempo récord.
Las puertas del bar fueron abiertas de una sola patada, dejando a la vista a unos hombres con cara de pocos amigos.

El líder de aquel grupo observó el lugar hasta que su único ojo bueno cayó sobre la cabellera roja de la capitana. Sus dientes rechinaron y una espada fue desenvainada, allí estaba la culpable de perder el ojo derecho que tanto estuvo buscando.

-Ruby... ¡¡Al fin te encuentro maldita zorra!! -grita el hombre-

-Ha? -dice en tono aburrido y gira sobre el taburete, bebiendo su vino mientras observa al hombre- Oh vaya, ¿a quien tenemos aquí? El idiota que perdió el ojo por culpa de su propia arma~ -ríe al igual que algunos en el bar-

-¡¡¡ Tú..., tu me arrancaste el ojo!! ¡Con mi propia espada!!!

-Tu quisiste violarme, estamos a mano. -sonrie leve pero con la mirada oscurecida sobre el hombre- O quieres que te quite el otro?

El hombre enojado, comenzó a caminar en dirección a la pelirroja, aunque rápidamente su tripulación se puso frente a ella, protegiéndola de cualquier intento de ataque.
Endeavor y Eraserhead también se pusieron de pié, mirando seriamente a aquellos hombres que interrumpen en el bar, esperando resolver aquello de una manera pacífica sin que nadie salga lastimado.

Aunque al parecer eso no va a suceder en esa noche tan pacífica.

-Bien~ bailemos un poco, caballeros~ -sonrie burlona la pelirroja, desenvainando su pistola de su cinturón-

-Bien~ bailemos un poco, caballeros~ -sonrie burlona la pelirroja, desenvainando su pistola de su cinturón-

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-||Tempestad ||- #BNHA. [Aizawa Shota x Oc]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora