Capítulo 6

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Éste es un capítulo especial dedicado a MollyBebe813.

Ángeles.

Éste es el momento donde no sabes ¿qué hacer?ni a quién creer pero dicen que guerra avisada no mata soldado, así que lo mejor sería alejarme ¿no?pero también está lo que en verdad quiero, Mite no se librará tan fácil de mí.

Mi madre siempre dice que si tu corazón te impulsa hacer algo a ruegos, haz lo porque siempre habrá una razón.

—¡Ángeles!¡angi!

Dejé de caminar al escuchar a alguien gritar mi nombre, giré y ví a Yulia venir corriendo hacia mí. La miré mientras acomodaba mi mochila al hombro, todo mi ánimo se esfumó después de las advertencias de Sline, que por extraña razón confío en él, detrás de sus ojos veo un tierno chico, no un oscuro monstruo detrás de su caperucita.

Yulia respiró como perro hambriento al estar frente a mí, y antes de poder objetar alguna palabra se tomó unos minutos, no es buena para los deportes en cuanto yo sin importar que en él instituto hago ejercicios, todos los sábados, mamá me saca a correr, sólo me le niego cuando sé que Mite no estará en casa.

—Entendí que hasta que no superes a Maite nadie más te gustará, lamento haberte hecho sentir mal. — se disculpó mirándome a los ojos con una sonrisa de labios sellados.

La miré sin expresión e hice una mueca con los labios. — Me duele que no confíes en mí, no te negaré que me agrada Sline y que es súper lindo pero no me gusta quiero que lo archives. — expliqué.

—Archivado. — alzó su palma en forma de promesa y simplemente asentí.

—Por cierto. — la señalé con mi dedo índice. —, es más lindo por dentro que por fuera. — me dí la vuelta para seguir mi caminata.

—¿Qué?¡pero si es un patán!— la oí exclamar.

—No con todas. — agité la mano.

— ¡¿Y tu vestido?!

—Sabes la hora, lugar y fecha. — exclamé y seguí mi camino.

.....

Nunca me había drogado pero tampoco tenía intensiones de hacerlo jamás ¿ni siquiera por él?quien se encontraba frente a mí invitándome a hacer cosas que ni en mis peores pesadillas haría, o al menos eso creía, cuando estás enamorado haces estupideces y he aprendido la lección en carne y hueso.

—Ahora relajáte. — con cuidado me acostó en el suelo mientras me contemplaba de lado con una mano bajo su cabeza, se veía sumamente sexy, deseé que ese momento nunca acabara aunque me estuviera condenando junto con él en vez de hacer lo contrario.

—Vez que rico se siente. — entrelazó sus dedos con los míos. —, no hay nadie que te arruine él momento, ni siquiera recuerdos y menos problemas.

—Pero es sólo por un rato. — dije viendo él techo borroso.

—Cada vez que estés harta de todo. — me sonrió pícaramente y de repente me besó.

—Me gusta pero no quiero.  — susurré contra sus labios. —, no es suficiente y tampoco sano.

—Shhh. — me besó nuevamente pero ésta vez fue feroz. Deseé tanto éste momento que me entregué totalmente para disfrutarlo pero todo cambió cuando empecé a sentir sus manos tocarme con desesperación, como si al fin tenía en frente al bocadillo que tanto deseó.

Lo quería, sí, pero mi objetivo no era eso y mi dignidad me definía como mujer.

—Detente. — pedí pero era como estar en coma y querer despertar.

Maite (Desgarrador#1 ✔)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora