Sergio Reguilon acaba de llegar a Londres para jugar en el equipo inglés del Tottenham. Lejos de su familia y de su novia tendrá que adaptarse a una vida nueva en un país nuevo.
Naike vive en Londres desde hace un par de años. En las clases de coci...
*** Esta es la canción del videoclip. La canta Adam Lambert y es de su primer disco. Es bastante bonita por cierto ***
Habían ondulado su larga melena rubia y la habían maquillado de una forma muy natural. Llevaba un precioso vestido blanco que realzaba su figura. Naike suspiró asumiendo que se acababa de meter en un gran lío. Se miró en el espejo y tuvo que admitir que habían hecho un gran trabajo. Se veía bastante bien. Estaba nerviosa. Muy nerviosa.
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Salió del vestidor dirigiéndose hacia los jardines. Allí grabarían las primeras escenas. Tenían que aprovechar que aún no daba el sol de lleno, sobre todo porque pronto empezaría a hacer calor. Los jardines tenían un aspecto precioso a estas horas. Cuando Naike llegó, Sergio la miró embobado. Estaba preciosa. Era tan bonita que le dolía el corazón. Ella lo miró también. Estaba muy guapo con su pantalón y su camisa blanca remangada. Habían peinado su cabello para que pareciera que lo tenía alborotado. Ella solo pudo pensar en que no tenía ni idea como iba a aguantar todo el día a su lado. Si con solo tenerlo cerca ya estaba nerviosa perdida. Sam se acercó a ellos para darle instrucciones. El chico sabía lo que hacía, y hoy iba a demostrarle a todo el mundo que era alguien más que el novio de Adam.
- A ver -les dijo Sam- quiero que paseéis por el jardín e intentéis olvidaros de las cámaras. Sé que es difícil pero también sé que lo vais a hacer muy bien. Quiero que os cojáis de la mano, que os sonriáis, que os contéis cosas al oído. Abrazaos, besáos. Tampoco creo que os cueste mucho porque hasta hace nada lo hacíais
- Ya, pero antes era por gusto y ahora es por dinero -le contestó Naike cruzando sus brazos. Sergio se sintió muy dolido cuando lo dijo y procuró no mirarla a los ojos porque ella lo notaría
- Precisamente por eso amor tienes que hacerlo bien -le contestó Sam impaciente- y por cierto, si no me gusta lo que veo, no me importa repetirlo ochenta veces, y ya mismo empezará a hacer más calor. Vosotros mismos
Sam se fue de allí resoplando. Vinieron a indicarles dónde se tenían que poner y ellos entraron dentro de los jardines. Naike sin mirar a Sergio. Estaba esperando que le dieran la señal para empezar. En esta ocasión, la música no sonaría, así que sería más fácil hablar.
- ¿Ni siquiera vas a mirarme rubia? -le preguntó Sergio poniéndose delante de ella
- Lo haré cuando me lo digan - le dijo Naike mirando a un punto fijo en el infinito. Si miraba esos ojos se perdería, seguro
Un rato después escuchó a Sam que les daba la orden de empezar. Sergio la cogió de la mano y empezaron a andar por los jardines. Escuchaban a Sam pidiéndoles que sonrieran. Naike estaba haciendo un gran esfuerzo, pero no quería que todo saliera mal por su culpa, así que cogió la mano del chico sonriendo. Empezaron a actuar como si fueran pareja. Andando cogidos de la mano. Él pasó sus brazos por sus hombros y le susurraba en el oído haciendo que ella se riera.
