Capítulo 53

1K 65 10
                                        

Increíblemente ya habíamos llegado a la fecha número 15 del calendario en éste año tan extraño para el mundo. Ya todos los equipos estábamos en Bahrein para las siguientes dos carreras que se iban a celebrar en el mismo circuito pero en diferente trazado.

Desgraciadamente, la clasificación no fue buena para la Scuderia. Pese a que Leclerc arrancó desde la pole hace tan solo un año en este lugar, para ésta ocasión el monegasco iba a comenzar desde la duodécima plaza justo por detrás de Sebastián.

Estaba viendo como Charles se preparaba para subirse al auto mientras tomaba de mi bebida fría.

- No puedo creer que ya nos quede poco.

- Lo mismo digo. Sólo 3 semanas para las vacaciones.

- Me vas a extrañar, Lía - reí y le entregué su casco.

- De ser tu niñera, puede ser. Tene cuidado - le dije mientras se lo colocaba.

- Siempre - contestó y me guiñó el ojo antes de entrar al monoplaza.

Ya estaba todo listo en el asfalto para empezar la carrera y apenas unos segundos después de que se apagara el semáforo, se produjo un fuerte accidente en las primeras curvas y la banderas rojas se agitaron en todo el circuito. En los boxes reinaba el silencio. Aún no decían cuales eran los autos involucrados. Solo veíamos como un monoplaza se estaba incendiando tras un fuerte impacto en la curva tres.

Luego de un par de minutos que nos parecieron eternos, informaron que se trataba de Grosjean y todos esperábamos que el piloto estuviese bien mientras los segundos pasaban lentamente y sólo podíamos ver las llamas saliendo del auto.

- Mierda, mierda, mierda, mierda - se escuchaba la voz desesperada de Charles por los auriculares del equipo - Esto fue enorme. Esto fue enorme. ¿Él está bien? 

- En un momento regreso con vos - le habló su ingeniero de pista. 

- ¡Mierda! Lo vi en los retrovisores. ¿Quién es? - cuestionó.

- Es Grosjean - le informaron - Sigo sin información, te lo haré saber. 

- Nooo, por favor. Oh, mierda. ¿Sigues sin información? 

- Sigo sin información - le confirmaron.

Escuchar la desesperación de Charles por radio hizo que se me formara un nudo en la garganta. Finalmente les informaron que la carrera se detenía y que tenían que ingresar a los boxes hasta que la pista estuviera nuevamente habilitada para correr. 

Por suerte todo había quedado en un susto. La FIA pudo confirmar que el piloto francés estaba bien y que había abandonado inmediatamente el monoplaza por sus propios medios e incluso había hablado con los comisarios. 

Fui en busca del monegasco que aún estaba saliendo del auto número 16. Rápidamente me miró y le sonreí apenas para que se tranquilizara.

- Romain está bien. Un poco aturdido, pero está bien.

Leclerc soltó el aire que estaba conteniendo y aflojó sus hombros. Seguidamente se sentó en el borde de los pits y agachó la cabeza. Caminé los pocos pasos que nos separaban y me puse de cuclillas frente a él.

- ¿Necesitas algo? ¿Querés agua? - cuestioné alcanzándole su botella.

- Gracias - su voz se escuchaba apagada.

Ambos levantamos la vista hacia la gran pantalla que había en los boxes y según lo que pasaban en la transmisión, el accidente había llegado tras un cambio de dirección del piloto de Haas en el que se había rozado con el Alpha Tauri de Kvyat. El choque había hecho que el francés haya perdido por completo el control hasta impactar contra las protecciones.

No me sueltesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora