No me sueltes

Capítulo 2

Instintivamente le sonreí y él me devolvió el gesto. Un cruce de miradas de 3 segundos y fue suficiente para un pequeño flechazo. 

¿Acaso eso fue lo que pasó?

Bueno, sé que cuando sentís amor a primera vista por una persona con la que te acabas de cruzar, lo sabés porque te impacta intensamente. Básicamente te deja sin aliento. En ese corto espacio de tiempo ha aparecido alguien que nos roba toda la atención y se convirtió en nuestro amor a primera vista, te das cuenta de que no existe nadie más alrededor, aunque 50 personas vayan caminando por la calle. Nuestro corazón da un vuelco y nuestras pulsaciones y latidos se aceleran, aumenta la temperatura corporal y sentís nervios al estar delante de tu flechazo. Puede que te ruborices o que incluso sientas un bloqueo que te impida actuar. Esa persona te hace sentir una atracción intensa inmediata, pero no solo a nivel físico. No puedes dejar de apartar la mirada. Sentís muchas ganas de acercarte a hablar con él y querer saberlo todo sobre tu nuevo amor a primera vista. Aunque lo acabes de conocer, sentís como si ya conocieras a esta persona. Te da la sensación de tener una conexión o química especial con él, y es posible que incluso creas que tengas cosas en común. Aunque sea una persona a la que acabas de conocer o con la que te has cruzado durante un instante, no puedes dejar de pensar en ese momento y en si la volverás a ver.

Y si. Sentí todo eso con solamente una mirada.

- Está soltero - escuché a mi lado.

Desvié mis ojos para descubrir quién me había hablado y me encontré con la sonrisa de Daniel Ricciardo.

- ¡Te sonrojaste! - dijo y empezó a reír.

- ¿Acaso ahora sos cupido? - le pregunté mientras intentaba que se callara.

- Puede ser... - respondió mostrándome el tatuaje del querubín que tenia en su antebrazo - Harían una bonita pareja.

- El calor te está afectando Ricciardo, capaz tengas fiebre y estés delirando - lo miré burlona y me tenté.

- Mi amigo es un buen partido. Miralo, es lindo. Aunque no lo es tanto como yo...

- Te dejo con tu ego. Mejor sigo hasta el box, tengo trabajo que hacer... - dije y comencé a caminar hacia donde estaban mis compañeros de la Scuderia.

- Lo digo en serio, Lía - gritó Dan antes de entrar a su motorhome.

Llegado a mi lugar, me senté frente a la notebook y empecé a diseñar el flyer que tenía que subir a las redes sociales ya que dentro de poco los autos iban a salir a pista.

No iba a negarlo. Las palabras de Daniel anduvieron rondando por mi cabeza durante un buen rato. "Está soltero". Vamos. Quién creería que Michael Italiano estuviera soltero. Si hasta hace pocas carreras atrás, su novia andaba por el paddock.

Intenté despejar mi mente para poder concentrarme en mi trabajo.

Media hora después tenía todo terminado. Por lo que decidí ir a dar una vuelta por el box de Ferrari para poder sacar una fotos y subirlas a las historias de Instagram. No podía descuidar mi trabajo por tener la cabeza en una persona.

Estaba muy pendiente de lo que estaba haciendo que me asusté cuando sentí mi teléfono vibrar en el bolsillo del pantalón. Lo saqué y abrí el WhatsApp.

"Lo decía en serio cuando te comenté que harían una linda pareja. Espero que no te moleste que le haya pasado tu número"

Decía el mensaje de Dan y una sonrisa se dibujó en mis labios mientras le contestaba.

"La verdad es que no me molesta para nada. Pero me lo voy a cobrar, Daniel. No te va a salir barato el que me hayas vendido así"

- ¿Y esa sonrisa? - preguntó Charles mientras terminaba de ponerse la capucha ignifuga.

- No es nada - respondí mientras guardaba mi celular y buscaba su casco.

- Mmmmh. No te creo. Después me vas a contar.

Reí y le entregué su protección.

- Tene cuidado. - le dije mientras se lo colocaba.

- Siempre - contestó y me guiñó el ojo antes de entrar al monoplaza.

Lo observé salir hacia la pista y me dispuse a ver la transmisión por la tv que teníamos en las paredes del box. Segundos después, enfocaron el lugar de Renault con Daniel subiéndose a su auto y a su lado estaba su mejor amigo riendo. Me concentré en la pantalla y mi sonrisa se hizo presente nuevamente.

Realmente Michael era muy lindo.

Hola flechazo.