Sonreí embobada al sentir el roce de una nariz en mi mejilla.
- Buenos días, amor - Michael murmuró con voz roca.
- Hola Bonito - respondí adormilada.
- ¿Cómo dormiste?
- Mal. Alguien roncó toda la noche.
- ¿En serio? - preguntó colorado.
- Nah, mentira - reí - Siempre duermo muy bien cuando estoy con vos.
Me apegué a su cuerpo y me abrazó. Sus manos recorrieron mi espalda desnuda mientras yo delineaba su torso con la yema de mis dedos.
- ¿Estás segura de lo de hoy?
- Es raro - suspiré y lo miré - Pero si, estoy muy segura.
- ¿Por qué decís que es raro?
- Porque hace bastante tiempo que no me presentan oficialmente como pareja de alguien. Y estoy nerviosa.
- Mi familia te va a adorar, Lía. No tenes porque preocuparte. Mamá me ha dicho que hace mucho tiempo de que no me ve así de feliz, y eso es gracias a vos.
Sonreí y Michael depositó un beso en mi frente.
- Algún día me vas a matar de amor - contesté y escuché su carcajada.
- Me gusta ser sincero con lo que siento.
- Basta Italiano - me escondí en su cuello - No te imaginas lo mucho que te quiero.
- Y yo a vos, amor.
Me subió encima de él y lo miré sorprendida.
- Hay que bañarse - informó - Asique ahora te llevo.
Se levantó de la cama mientras colocaba mis manos en su nuca y lo abrazaba con mis piernas.
- ¿Sólo baño? - cuestioné al sentir como me sostenía de mis glúteos y los apretaba.
- Ambos sabemos que no - levantó una ceja sonriendo y reí.
Entramos a bañarnos, aunque ya sabemos que fue lo que pasó primero.
~
- ¿Lista? - preguntó Michael colocando la notebook frente a nosotros.
- Si - asentí - Lista.
El entrenador apretó el link de la videollamada y segundos después aparecieron varias ventanas conectadas.
- Hola a todos - saludó.
- Hola hijo - respondió una señora - ¿Cómo estás?
Me moví en el sillón un poco nerviosa y el entrenador puso su diestra sobre mi muslo dejando un leve apretón.
- Muy bien ma, ¿y ustedes?
- También. Más ahora que los vemos a ambos - dijo suavemente.
- Familia, ahora que estamos todos presentes en ésta llamada, les quiero presentar a Lía - me miró y sonrió - Mi novia.
Sentí arder mis mejillas mientras escuchaba como varias voces saludaban y gritaban por los parlantes de la pc.
- ¡Hola! - moví mi mano saludándolos por la cámara.
- Que linda es, hermanito - comentó quien sería la menor de la familia.
- La más hermosa de todas - respondió Michael.
Retiró su mano de mi pierna para colocarla en mi hombro y acercarme a él. Busqué la ventana con sus padres y estaban sonriendo. Respiré y me relajé bastante luego de esos primeros comentarios.
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No me sueltes
FanfictionSoy Lía y tengo... No, tachen eso. Puedo hacerlo mejor. Me llamo Lía, y tengo muchas cosas para decir. Al principio no sabía que pensar, pero luego, lo que empezó como un simple coqueteo terminó siendo algo más. Se ganó mi corazón, se ganó mi amor y...