xxviii

8.8K 644 176
                                    

Los chicos desaparecen del patio en un movimiento rápido sin que nadie se diera cuenta y comienzan a correr escaleras arriba.

Hannah puede notar como su corazón late a la velocidad de la luz, no paran de temblarle las piernas cosa que hace que más de una vez se tropiece sin llegar a caerse. Teme por la vida de su padrino, es lo único que les queda a los mellizos y no piensan nada más que en salvarlo.

–¡Harry! –le llama Hermione con la respiración agitada de tanto correr.–¿Estás seguro?

–Lo he visto Hermione, era en el mismo sitio donde atacó al padre de Ron.

Hannah y Harry siguen escaleras arriba mientras Hermione y Ron se quedan detrás pensando algo para tranquilizarlos.

–Chicos, por favor, escuchad –pide Hermione.–¿Y si Voldemort quiere que veas esto? ¿Y si solo le está haciendo daño porque es la única vía que tiene de llegar a ti?

–¿Y si es así debemos dejarle morir, Hermione? –se gira Hannah hacia su amiga con su ceño fruncido.–Es la única familia que nos queda.

–¿Qué hacemos? –pregunta Ron.

–Tendremos que utilizar la red flú –dice Harry mientras siguen subiendo.

–No podemos, están todas inhabilitadas –dice Hermione.

–No, todas no –responde Hannah.

Ambos hermanos saben donde ir perfectamente, al despacho de Dolores Umbridge. Cuando los castigó ambos observaron que tenía una ahí, no sabían el porqué, pero ahora agradecen que esté.

Ron abre la puerta y los cuatro se acercan a la chimenea de la habitación.

–Alertad a la Orden si podéis –dice Harry.

–¿Estáis tontos? Vamos con vosotros –responde Ron.

Todo iba genial, hasta que la mujer vestida de rosa aparece en la puerta, con toda su ropa y cara manchada por los fuegos artificiales de los gemelos Weasley.

Dolores Umbridge les había pillado.

–¡Ya os tengo! –exclama enfadada mirándolos.

Se acerca a los cuatro y a empujones sienta a los mellizos en unas sillas, mientras todos los demás alumnos que trabajaban para ella sujetan a Ron y Hermione.

–He cogido a este intentando ayudar a la chica Weasley –Draco aparece por la puerta y su voz se apaga cuando ve a Hannah sentada en la silla con Harry a su lado.

Ambos chicos se miran fijamente y Draco traga saliva mordiendo su lengua. ¿Que debía hacer?

Para Draco no es nada agradable ver a la chica a la que ama sentada con una espantosa mujer delante suya haciéndoles preguntas sin parar, para la cual "trabaja", pero ser hijo de Lucius Malfoy es lo que tiene.

–Ponte ahí, con los demás –le indica Umbridge.

Ron y Hermione estaban siendo sujetados por Crabbe y Goyle, y a la vez estos sujetaban a Luna y Ginny.

–Ibais a ver a Dumbledore, ¿verdad? –pregunta Dolores intentado no perder la paciencia.

–No –contesta Hannah rápidamente, sabe que si habla Harry la va a liar y lo pillarían.

Hannah Potter | Draco Malfoy [✓]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora